Uno de los setenta abanicos de varias épocas y países de la Colección Montis, propiedad de Sa Nostra.

JULIO HERRANZ Una amplia representación de la Colección Montis de abanicos de Sa Nostra se presenta desde hoy en la exposición que se inaugura a las 20'00 horas en la sala de cultura de esta entidad en Eivissa, donde estará abierta al público hasta el próximo 25 de febrero. La muestra, incluida en el programa con el que Sa Nostra celebra sus 125 años de historia, fue presentada el pasado julio en la sala homónima de Formentera La Colección Montis de abanicos está formada por más de setecientos ejemplares de procedencia mayoritariamente francesa y china, que abarcan un amplio periodo que va desde mediados del siglo XVIII hasta comienzos del siglo XX, aunque los más numerosos son los realizados a lo largo de todo el siglo XIX. Su última propietaria fue la mallorquina Maria Montis i Castelló (1881-1963), quien la recibió como parte de la herencia familiar, que ella amplió con nuevas adquisiciones, convirtiéndola en una de las mejores de España por su variedad y calidad.


Comprada por Sa Nostra en 1975, la comisaria de la exposición, Elvira González, ha realizado una selección de casi 70 abanicos característicos, clasificados por series y ordenados por secuencia cronológica, para esta exposición itinerante por las Islas.

Entre los abanicos plegables los hay representativos de los estilos rococó, neoclásicos y románticos; también algunos ejemplares costumbristas, isabelinos, fotográficos o sentimentales, así como algún caso excepcional de propaganda política, ilustrado con uno de los episodios de la Revolución Francesa. Entre los abanicos plegados de la China se encuentran en la exposición algunos de los llamados cabriolets y abanicos de tipo helicoidal, también conocidos con el nombre de las cien o mil caras, por la abundancia de personajes que los decoran, plantados de pie en frondosos jardines con pabellones, acompañando a los mandarines entronizados de alguna corte imaginaria y ancestral.

Además, «con una morfología diferente, presentamos los llamados abanicos en palmas o palmetas y los brisé o de pelea, con una estructura básica de varillas, sin país, que permitía la experimentación con otros materiales alejados del papel o la piel característicos de los abanicos plegables», ha explicado Elvira González.

Los 125 años de historia de Sa Nostra han aportado a Eivissa otras propuestas artísticas, como las tres exposiciones de su colección de artes plásticas que bajo el título de Tradició i contemporaneïtat se presentaron el pasado otoño. La primera, con artistas de vanguardias sin relación con las Pitiüses, se mostró en la misma sala que la de los abanicos el pasado septiembre. Dos meses después se presentó en el antiguo salón de plenos del Ayuntamiento de Eivissa una exposición con artistas vanguardista de Eivissa, mayormente; y una tercera, en el Museu Puget de Dalt Vila con artistas coetáneos de los Puget. Las dos últimas, aún abiertas.