Una galería de ilustres con enigma

Datos relevantes que se desprenden del estudio previo a la museización de la galería de retratos, realizada por la directora del Museu d'Art Contemporani d'Eivissa, Elena Ruiz Sastre. Una información llamativa que, sin embargo, se queda en el campo de la especulación, pues no se ha encontrado prueba documental que confirme la sospecha de que algunos de los hermanos compraron el título; práctica, por otra parte, bastante común en las oligarquías de aquellos tiempo, en los que los hábitos democráticos brillaban por su ausencia.

El estudio en cuestión revela otra serie de curiosidades: en los últimos cincuenta años su ubicación ha variado; durante este periodo algunos de los retratos no existían y fueron encargados a posteriori por distintas corporaciones, lo que provoca que haya retratos de época y retratos de estilo; hace unos veinte años los retratos existentes estaban colgados en un marco corrido y unificado, dividido en cuarteles, dentro de la sala que se utilizaba como salón de plenos. Cuando se especuló sobre si la bóveda del salón contendría pinturas cenitales-murales, se decidió reubicar los retratos en marcos independientes en la antesala, creada en los años ochenta por mandato de otro ejecutivo municipal.

Así las cosas, se encargaron marcos idénticos que no responden a ningún estilo concreto, y se procedió a adaptar las telas a esta medida uniforme. Como no todas medían igual, muchas fueron reenteladas y repitandas. Asimismo se procedió a identificar a los retratados mediante una placa clavada directamente al marco, con su nombre, apellido y fechas de nacimiento y muerte (en castellano), ubicándolos según un criterio arbitrario, no siempre cronológico y una distancia tan elevada del suelo que no facilitaba la visión en perspectiva del espectador.

Todas estas anomalías se han subsanado en la medida de lo posible siguiendo criterios museológicos homologados. Además, esta fase de investigación que ha iniciado el MACE incluye la revisión de Actas en el Arxiu Municipal para saber con precisión quién instó, o quiénes, la declaración del título; la investigación sobre los elementos que adornan las vestimentas (condecoraciones y demás), así como las biografías de los sujetos 'ilustres' en cuestión. Investigación que quedará plasmada en una próxima publicación. También se han restaurado los deterioros en los marcos, estucando, dorando o restituyendo pigmentos; se han limpiados los bastidores y, el próximo año, se procederá a la restauración de las obras, algo que todas o casi todas necesitan con urgencia.

La nueva ubicación de la galería de Hijos Ilustres, motivada en parte por la utilización de la antigua sala de pleno y la antesala como espacios expositivos del MACE, se decidió por varios motivos: sus dimensiones, idóneas para permitir la colocación lineal de las obras; sus condiciones medioambientales, con tres ventanas que se abren al norte, con excelente luz natural; y porque el pasillo tiene una serie de puertas flanqueadas por sillares de piedra, lo que proporciona cierta nobleza a esta parte del Ayuntamiento de Vila, otrora Convento de Dominicos. Incluso en la última puerta existe en su clave un escudo de la Orden de Predicadores con la leyenda 'Celda Prioral'. Razones todas que resultan bien convincentes.

No obstante, el pasillo de los ilustres contiene diverso mobiliario de aluvión que hay que reubicar: plantas, juegos de tresillos y una escultura de una Bienal que será devuelta al MACE, entre otra serie de cosas.