Vicente Valero (Eivissa, 1963) ganó ayer el XX Premio Internacional de Poesía Fundación Loewe, dotado con 20.000 euros, por su obra Días del bosque; mientras que el de Creación Joven, con 7.000 euros, fue para el nicaragüense Carlos Fonseca por Una oscuridad brillando en la claridad que la claridad no logra comprender. Con sólo 18 años, Fonseca es el ganador más joven de la historia del Loewe, que celebró ayer su vigésima edición con una cena en el Teatro Real de Madrid al que asistieron numerosas personalidades del mundo de la cultura, la política y el periodismo, que pudieron felicitar a Valero, aunque no a Fonseca, ya que reside actualmente en México.
Según explicó Vicente Valero, Días del bosque es «un libro que celebra la naturaleza», pero entendida ésta no como «secuencias paisajísticas», sino como «algo íntimo que me consuela y me calma». Una celebración con «expresión íntima, emocionada a veces, de un diálogo cotidiano con la naturaleza desde la gratitud y la humildad», precisó el poeta, en quien se da la circunstancia de que en 1992 ya ganara el Loewe de Creación Joven (menores de 20 años) con Teoría solar.
Según explicó Valero a este periódico, Días del bosque, escrito en dos tandas (octubre y noviembre de 2006 y mayo de este año), «tiene una cierta continuidad» con su anterior poemario, Libro de los trazados (2005). «Pero formalmente es muy distinto. En el otro eran poemas muy largos y aquí son muy breves en la primera parte, de tres o cuatro versos; más largos y en prosa en la segunda, más un poema final de cien versos», precisó el poeta, añadiendo: «Lo que trataba de hacer en el anterior era ser más discursivo sin ser narrativo; y aquí hay un poco las dos cosas».
Días del bosque será publicado próximamente por la editorial Visor; puede que justo después de otro libro que Vicente Valero tiene en cartera con la editorial Pre-Textos Diario de un acercamiento. «Es un libro en prosa a modo de diario, pero no íntimo, sino más bien literario; y con un tema común, las relaciones entre el arte y la naturaleza», precisó el autor. «Lo que este libro tiene de diario es que todo está escrito desde la inmediatez; todo lo que ocurre, leo, un viaje y demás, está descrito inmediatamente».
Licenciado en Filología por la Universidad de Barcelona, Vicente Valero compagina su poesía con colaboraciones sobre temas culturales en diversos medios. Ha publicado varios ensayos, como el dedicado a Juan Ramón Jiménez, uno de sus poetas preferidos, en La estación total con las canciones de la nueva luz (1988), Experiencia y pobreza. Walter Benjamin en Ibiza, 1932-1933 (2001). Claudio Rodríguez o Antonio Gamoneda son otros poetas que han influido en Valero, que desde hace quince años reside en la Eivissa rural. Otros libros suyos de poesía son: Jardín de la noche (1986), Herencia y fábula (1989), Vigilia en Cabo Sur (1999) y Libro de los trazados (2005).
El jurado del Premio Loewe lo formaban Francisco Brines, José Manuel Caballero Bonald, Juan Antonio González Iglesias, Eduardo Lizalde, Ana María Moix, Jaime Siles, Luis Antonio de Villena y Carlos Bousoño.
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