J. HERRANZ

La galería La Fábrica de Joyas, en Sant Miquel, acogerá a partir de las 18,00 horas de hoy jueves la inauguración de una exposición conjunta de joyas de Alberto Citterio y esculturas conjuntas de Elena Albeni y Roland Kocherhans, que estará abierta al público hasta el 9 de septiembre.

Para la ocasión, el orfebre italiano, responsable de esta galería-taller ubicada en la colina de la iglesia del pueblo, ha realizado una serie de joyas únicas realizadas con oro, plata y piedras preciosas e inspiradas en la vegetación de Eivissa. Además, Citterio ha recuperado la antigua tradición de los pentáculos, amuletos de la magia cristiana medieval que proporcionan protección a quien los lleva.

Por su parte, la italiana Albeni y el suizo Kocherhans, que trabajan conjuntamente desde 1998, traen a Sant Miquel unas creaciones relacionadas con la antigua «Coincidentia Oppositorum», teorizada en el siglo XIV por el filósofo y místico Nicolás de Cusa.

Según el crítico Gianandrea di Terlizzi, «todas sus obras, incluso las que representan objetos de uso cotidiano, se caracterizan por la presencia sutil e impalpable de un cierto espíritu vital: están animadas por un soplo vivificante que oscila de la tragedia a la ironía, de la pasión a la risa. El arte de hacer convivir los opuestos en el mismo objeto produce un efecto desgarrador y fascinante, sumamente móvil. Sus esculturas parecen estar siempre a punto de saltar, bailar, arrojarse al vacío. Y es justamente esa convivencia extraña y forzosa de parejas de opuestos lo que les proporciona, paradójicamente, su extraña y fascinante apariencia de vitalidad natural».

La estructura de las esculturas de esta pareja de artistas singulares están realizada principalmente de hierro, madera y cola; piezas acabadas con cinta de papel, resina de látex, mármol y barnices.