La muestra sobre los romanos en Balears no se verá en Eivissa por falta de infraestructuras

Tras permanecer cuatro meses en Palma, Menorca acoge una versión reducida de la importante exposición

Inauguración de la exposición sobre los romanos en las Islas, el pasado noviembre en el Gran Hotel de Palma.

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La exposición «El món romà a les Illes Balears», que actualmente se presenta en la sal del Roser de Ciutadella, donde estará hasta el día 22 de este mes tras ser mostrada durante cuatro meses en el Gran Hotel de Palma, no visitará Eivissa. Según explicó a este periódico el director del Museu Arqueològic, Jordi Fernández, la razón se debe «a que no existe en la isla un local que reúna las condiciones pertinentes para hacer una exposición de este tipo, que necesita amplitud de espacio para poder exhibirla», precisó Fernández, añadiendo: «Si tuviéramos un museo de nueva planta, que es lo que vamos pidiendo desde hace tiempo...». La extraordinaria exposición, organizada y producida por la Fundació «la Caixa» se adentra en los siete siglos de historia romana en las Islas. En la amplitud que se presentó en Palma, la muestra hacía un recorrido histórico y pedagógico a través de 200 piezas procedentes de 23 instituciones o coleccionistas privados. Entre ellos, los museos de Mallorca, Menorca, Eivissa y Pollentia; además de piezas encontradas en excavaciones isleñas que actualmente se encuentran en Barcelona, Madrid, París y Nueva York.

Y no es la primera vez que Eivissa se queda al margen en la recepción de muestras de este calibre. «Pues no, y es una pena. La isla ha perdido ya varias exposiciones importantes con este tema. Y es que cualquier exposición de cierta magnitud que pueda llegarte de otros centros, de las Islas o más allá, necesita espacio, unas climatología adecuada, unos sistemas de seguridad apropiados y todo lo que hoy requiere una sala de exposiciones donde vayas a meter un patrimonio cultural. Y eso, lamentablemente, en estos momentos Eivissa no lo tiene», subrayó Jordi Fernández. Algunas de las piezas aportadas por Eivissa que estuvieron en Palma no han viajado a Menorca; entre otras, el famoso busto de la diosa Tanit. «No me gusta que viaje tanto, porque le puede afectar. Hemos retirado varias piezas, sí, lo que no les pareció mal a los organizadores pues para llevarla a Menorca tenían que hacer una reducción de material. Me dijeron qué piezas se podrían retirar, y como la muestra va sobre los romanos, retiramos la parte prerromana». En concreto, en la sala de Ciutadella hay del museo de Eivissa «diversos vasos de terracota sicilitada, vidrios, piezas de cerámica, una cabeza báquica, un busto y una cabeza de mármol; pero los tres bustos de terracota que fueron a Palma -entre ellas Tanit y la máscara- han regresado ya a casa», concretó Fernández.

La propuesta para Menorca reúne 112 piezas arqueológicas de todo tipo, incluidas unas grandes esculturas con toga que estaban ubicadas en los espacios públicos de la ciudad o figuras votivas de diferentes divinidades. La exposición está estructurada en diversos ámbitos, que reconstruyen el momento de la llegada, la transformación territorial y la implantación de las ciudades, el comercio, las creencias, la vida cotidiana, el ocio y el concepto de la muerte que tenían los romanos. Las Illes Balears comenzaron a ser integradas en el mundo romano el año 123 a.C., tras recibir Quinto Cecilio Metelo la orden del Senado romano de limpiar de piratas sus costas. Esta intervención permitió ganar para Roma un punto estratégico en una de las rutas marítimas más importantes del Mediterráneo. Según han informado los comisarios de la exposición, los romanos fueron recibidos en las Islas a pedradas por parte de los honderos baleáricos, pero un año después ha habían conquistado Mallorca y Menorca. Sin embargo, según informó a este periódico Benjamí Costa, conservador del Museu Arqueològic de Eivissa, la principal diferencia respecto a las otras dos es que las Pitiüses «no fueron conquistadas por manu militari. Fue un proceso lento de integración progresiva en la estructura del Estado romano de lo que eran unas islas púnicas».