El auditorio del centro cultural de Can Ventosa acogió ayer un festival interdisciplinar a beneficio de los niños de una localidad de Camerún en la que reside y trabaja desde hace cinco años la monja teresiana ibicenca Victoria Escandell. La iniciativa (no incluida en el programa del centro cultural, pues se improvisó a raíz de la visita que está realizando la hermana misionera a su isla natal) surgió de Alicia Reina, sobrina de la religiosa, y Sonia Posilio, compañera de actividades teatrales de la primera, quien también participó en la presentación del espectáculo.

El programa del festival comenzó con una parodia teatral a modo de presentación a cargo del grupo Va por ustedes; a continuación, un grupo del Estudi Capricorn bailó el tema «Hello, my friend»; le siguió un desfile de moda infantil, que corrió a cargo de Modas Chiqui; una actuación de los clowns Coleta y Moqueto; el Show de Diego, un personaje ligado al mundo teatral desde hace tiempo; un espectáculo para niños realizado por Purpurina; la divertida actuación de José Ignacio y los Teleñecos, para concluir con otro número de baile a cargo del grupo de danza de Estudi Capricorn.

Victoria Escandell asistió al festival y agradeció a los organizadores «una iniciativa tan generosa», que hizo extensiva a todos los artistas que participaron en la velada. La hermana misionera teresiana lleva unos cinco años en Camerún, «pero son ya unos 20 los que estoy por allí, en varios países de Àfrica», precisó.

La solidaridad que se ejerce con los niños de Camerún procede principalmente del encuentro «Els Nens pels Nens», cuya sexta edición tuvo lugar el pasado mes de abril. La recaudación (como la del festival de ayer) estuvo destinada para construir en este país africano «un dispensario, un centro materno infantil y un centro cultural y social para la mujer». Una realidad que ha costado cuatro años , «pero que ha sido posible gracias a la solidaridad de muchos», puntualizó Victoria Escandell, añadiendo que «todas nuestras actividades misioneras se reducen a cuestiones sociales, especialmente a la promoción de la mujer, que es la mejor forma de ayudar a que pueblos tan necesitados salgan de su miseria».