El investigador ibicenco Nito Verdera, especialista en Cristóbal Colón, se muestra rotundo frente a la intención de la Associació Cultural Cristóbal Colón de Mallorca de exhumar los supuestos restos de la Catedral de Sevilla para analizar su ADN, comprobar su filiación con el Príncipe de Viana y demostrar así el origen mallorquín del almirante: «No hay ninguna posibilidad científica de comprobarlo, porque no se tienen huesos para comparar», comentó a este periódico.

Que Colón no pudo ser el hijo del Príncipe de Viana le parece claro a Verdera. «Si éste tuvo un hijo natural, nació en 1460, y como Colón murió en 1506, habría vivido 46 años; pero hay un testimonio escrito de su amigo Andrés Bernáldez en el que afirma que murió a los 70 años. No puede, pues, ser el mismo hombre». Según Nito Verdera, los restos depositados bajo el monumento del Faro de Colón de Santo Domingo (inaugurado en 1992) «están sepultados bajo toneladas de hormigón para que nunca más pudieran salir a la superficie». En cuanto a los que hay en Sevilla, «no tienen nada que ver con Colón, pues los que se depositaron en la Cartuja se perdieron en unas inundaciones».

Ante tal estado de cosas, el investigador ibicenco se muestra totalmente escéptico con las pretensiones de la asociación mallorquina. «Podrían especular con algún descendiente, pero es difícil, porque hubo un cambio de apellido para que no se perdiera el apellido Colón». «El problema es que no tenemos huesos de Colón; los de España se pierden y los de Santo Domingo están bajo el hormigón; ¿a ver qué van a hacer entonces?», concluyó.

Demostrar que Colón era catalano-parlante
El último trabajo en el que Nito Verdera anda empeñado en relación con Cristóbal Colón es dar un paso más para demostrar que el descubridor de América hablaba catalán. Con tal propósito, «estoy gestionando en estos momentos con catalanistas universitarios de Estados Unidos para que hagan un dictamen honrado y sin pasión de la tesis que mantengo en mi libro 'Cristóbal Colón, catalano-parlante'; así quedaría demostrado que el almirante procedía de algún territorio de la Corona de Aragón, no digamos de donde. Así se acabarían las controversias al respecto», explicó.