Ayer entró en vigor el decreto de la Generalitat que aplaza desde el 1 de agosto de este año hasta el 1 de junio del 2000 el Decreto del cine en catalán. El acuerdo se aprobó el martes pasado a propuesta del conseller de Cultura, Joan Maria Pujals, y según señala el preámbulo del Decreto, después de «constatar la disposición a doblar películas en catalán» por parte de las distribuidoras cinematográficas, a pesar de existir todavía «algunas cuestiones y dificultades técnicas» a solventar antes de concretarlo definitivamente».

El diálogo entre el Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña y las distribuidoras cinematográficas se abrió formalmente el pasado 29 de enero en Washington. Como resultado del buen clima de negociación establecido, el Gobierno catalán aplazó por primera vez el Decreto del cine, que inicialmente había de entrar en vigor el pasado 17 de marzo.