La arquitectura moderna realizada en Eivissa, en concreto un proyecto del arquitecto Josep Lluís Sert y otro de Erwin Broner, aspiran a convertirse en Bien de Interés Cultural (BIC) desde el pasado mes de septiembre. Fue entonces cuando el presidente de la demarcación en Eivissa y Formentera del Col·legi Oficial d'Arquitectes de Balears, Salvador Roig, anunció la presentación de los expedientes correspondientes ante la Comissió de Patrimoni del Consell Insular y la solicitud de adhesiones a nivel nacional e internacional. Hasta el momento, esta iniciativa ha recibido 28 apoyos. En diversas ocasiones, Roig ha destacado el valor pedagógico de estos dos proyectos para entender el movimiento de la arquitectura moderna. De hecho, tanto la urbanización de Can Pep Simó (en Cap Martinet) como la Casa Broner (en sa Penya) figuran en el catálogo nacional del Docomomo (Documentación y Conservación de la Arquitectura del Movimiento Moderno). Los expedientes presentados ante Patrimonio fueron realizados por los arquitectos Antoni Marí Torres y Pere Roig.

El pasado 15 de enero, Patrimoni informó favorablemente al respecto de la incoación de los mencionados expedientes, que se encuentran ahora a la espera de la resolución definitiva de esta comisión para la concesión del BIC para cada una de estas obras.

Entre las adhesiones recibidas en la sede de la demarcación pitiusa del Col·legi d'Arquitectes figuran, en gran número, aquellas remitidas desde diversas escuelas técnicas superiores y facultades de Arquitectura, aunque también pueden hallarse la de la Fundació Miró de Barcelona (el edificio que la alberga es obra de Sert) o la del Fórum Unesco/Universidad y Patrimonio. El Ayuntamiento de Eivissa también se ha agregado a la lista de apoyos, junto con el respaldo particular de Daniel Giralt-Miracle, académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, quien mantiene una estrecha relación con la isla de Eivissa.