La ‘comisión Koldo' cierra sin verle ni oírle entre airados reproches y tensión

La de ayer fue la última sesión con comparecencias, que se cerró con la del actual director general de IB-Salut, Javier Ureña (la primera, el 14 de mayo, fue la del ex director general,    Manuel Palomino, director de compras en 2020, cuando se compraron los cubrebocas objeto de litigio) pero no de la comisión, que volverá a reunirse el viernes para aprobar las conclusiones (el miércoles finaliza el plazo para presentarlas) que después se debatirán y aprobaran en el pleno. Ayer, como en jornadas anteriores, las intervenciones de representantes del PP y de Vox apuntaron a lo que previsiblemente serán las conclusiones. El viernes, fue la popular Marga Durán quien    comentó que «por acción u omisión, Armengol  [presidenta del Govern en 2020 y actual presidenta del Congreso] facilitó la entrada de la trama». Ayer, fue José Luis Mateo (portavoz) quien se agarró al testimonio más favorable a las tesis del PP –el del actual jefe de logística de compras, Rafael    Marcote– en el sentido de que había una orden de «inmovilizar» las mascarillas desde antes de que llegaran a Balears. Para los socialistas, y su portavoz, Iago Negueruela, lo puso de manifiesto en varias ocasiones, «las conclusiones ya están hechas». Dijo que quieren presentar sus conclusiones en la jornada de reflexión para usarlas como arma electoral y que, por eso, ni han esperado a seguir solicitando la comparecencia de Koldo García.

Faltaba información

Si la comparecencia de Armengol el pasado    viernes fue una de las más tensas, la de ayer la superó. Tanto en la de Antoni Costa, vicepresidente del Govern como en la de Ureña (que se detalla en la página siguiente). A ambos interrogó, y rebatió sus argumentos, el socialista Negueruela. Este se centró en algo que ha venido defendiendo desde que comenzó el caso: en los motivos por los que asumió en un primer momento los trámites para reclamar que inició el Govern anterior (según Costa, ese trámite no fue más que «un conato de solicitud de reintegro» que sólo formalizó el ejecutivo del PP) y luego se desistió «hasta dejarlo caducar». Costa indicó que en un primer momento faltaba «una información fundamental», que era que    un análisis del centro de medios de protección había demostrado que los cubrebocas no eran de la calidad solicitada. Y también fue «la ocultación de ese informe» lo que, según el vicepresidente, hizo que no se «descertificara» la petición para que las mascarillas se pagaran con cargo a los fondos europeos.    La tesis de Antoni Costa es que    el Govern anterior    «ocultó todo eso». Según Iago Negueruela, el Govern actual «miente».