17/05/2024 El experto en regulación de productos farmacéuticos Arturo Molina, en la Comisión de investigación de las mascarillas en el Parlament. POLITICA | Europa Press

La decisión del Govern de apartar las mascarillas compradas a la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas en base a los informes del Centro Nacional de Medios de Protección fue un error porque, según un perito, el centro se basó en normativas distintas a las que regían para las mascarillas que se enviaron a analizar.

El experto en regulación en productos farmacéuticos Arturo Molina Miranda ha comparecido este viernes, propuesto por Vox, en la comisión que investiga en el Parlament la compra de mascarillas a la empresa investigada por la Audiencia Nacional.

Se da la circunstancia, en todo caso, que Molina elaboró informes para las alegaciones que la empresa Soluciones de Gestión presentó tras la reclamación del Govern balear de agosto de 2023 y ha argumentado que, por estos motivos, la reclamación, al menos técnicamente no iba a ser viable.

"Parece poco razonable que se quiera permutar las características de los productos. Evidentemente las mascarillas de protección individual siempre han sido mucho más caras que las mascarillas quirúrgicas. Comparar precios no parece lo más lo más adecuado", ha argumentado.

A modo de ejemplo, ha añadido que es como "comprar manzanas y después poner al lado la foto de una pera y decir que son iguales, que las dos son verdes, blancas por dentro y con pepitas, pero la foto será diferente".

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A preguntas del portavoz del PSIB en la Comisión, Iago Negueruela, Molina ha matizado que el trabajo del Centro de Prevención fue correcto y fiable, aunque insistiendo en que sus conclusiones se basaron en normativas distintas, la europea para las FFP2 y china para las KN95. El socialista ha defendido con esto que la Administración tuviera dudas.

El perito, sin embargo, ha insistido en rechazar, en el turno de preguntas del PP, la decisión del anterior Ejecutivo de almacenar las mascarillas. "Si uno tiene narices de poner el producto en el mercado tiene que seguir adelante y si el producto no le ha convencido tiene que tomar la decisión de apartarlos y devolvérselo al proveedor", ha señalado.

En este momento del debate, el portavoz 'popular' en la comisión, José Luis Mateo, se ha referido a los informes redactados por Molina, que se ha ratificado en ellos y en los que expresaba dudas sobre aquella decisión. "¿Cómo puede retirarse un producto y guardarlo por si fuera necesario? En aquel momento no es que fueran necesarias, es que hubieran salvado muchas vidas", ha argumentado recordando los informes.

El experto, además, ha rechazado el empleo del término 'fake' para las mascarillas que el Govern adquirió en 2020 y que terminó reclamando. "Son KN95 y cumplen con lo que dicen las KN95. El Govern compró KN95 y le dieron KN95", ha argumentado.

Molina ha recordado en otro momento de la comparecencia que en abril de 2020 la cantidad disponible de mascarillas FFP2 era "extremadamente pequeña", porque solo se utilizaban en determinados ámbitos, especialmente industriales. El problema surgió cuando toda la población mundial empezó a necesitarlas y la Unión Europa vio la KN95, fabricada en China, con prestaciones parecidas. "Son equivalentes, pero no iguales", ha matizado.

La comisión de investigación del Parlament balear sobre la compra de material sanitario en pandemia continuará este viernes con cuatro comparecencias de perfil esencialmente técnico: un perito, un inspector, una trabajadora del IbSalut y el representante aduanero que intervino en la adquisición a Soluciones de Gestión.