La pequeña península de sa Foradada, en la Serra de Tramuntana, es una de las zonas que se incorporan en el primer inventario que se ha incluido en la propuesta. El listado está abierto a otras posibles incorporaciones.  | Jonas Martiny

Unidas Podemos y Més quieren que el Parlament apruebe una ley para proteger lugares de interés geológicos de la Comunitat. Se trata de zonas de las Islas que presentan una enorme singularidad ya sea por su geomorfología, por su hidromorfología, por su sedimentación o por otras características que los convierten en espacios únicos. Se definen como áreas o zonas que muestran una o varias características consideradas de gran importancia dentro de la historia geológica de una región natural.

La iniciativa la defiende el diputado de Unidas Podemos Pablo Jiménez, que ya ha pactado el apoyo de Més, pero que espera conseguir el apoyo de todos los partidos para una iniciativa que considera de gran interés ciudadano. Ya existe un primer listado de lugares de interés geológico de Islas, que se recogieron a raíz de la aprobación de la ley de Patrimonio Geológico estatal, pero Jiménez defiende que debe hacerse una ley propia para seguir las recomendaciones del Consejo de Europa. La intención de esta ley es dar protección especial a estas zonas, a las que se les ha prestado menos atención que a la flora o la fauna, pero que tienen una gran importancia en la construcción de la identidad patrimonial natural de los territorios. «Los acantilados que hay en las Islas muestran la historia del planeta», asegura Jiménez.

La proposición de ley lleva incorporado un primer listado de 169 lugares de interés comunitario en toda Balears. Está, por ejemplo, sa Foradada, en la Serra de Tramuntana, que tiene un interés principal geomorfológico y también sedimentológico. El Instituto Geológico Minero lo describe como un acantilado litoral con una oquedad por erosión marina y disolución. «Este hueco es de tamaño considerable que hace de este punto un paraje singular y muy simbólico de las Balears», añade la descripción. También aparece la isla Dragonera o el canal de Menorca, donde existe un campo volcánico submarino, lo que lo convierte en un espacio de interés geoquímico. Otros ejemplos que aparecen en el inventario es la playa des Codolar, en Eivissa, de interés geomorfológico. En Menorca aparecen el Cap de Favàritx, con interés paleontológico, o el propio Port de Maó, que en realidad es una gran falla y su principal interés es estratigráfico. En Formentera aparecen, entre otros, s'Espalmador y al Cap de Barberia, unos acantilados de interés geomorfológico.

BALEARES - VISTA GENERAL DE LA ISLA DE S'ESPALMADOR.

S'Espalmador, en Formentera, otra de las zonas que se incorporan.

Jiménez explica que, una vez aprobada la ley, deberá hacerse un plan de ordenación de todos estos espacios para regular las actividades permitidas y hacer un régimen de usos. «Hay elementos que tienen millones de años y, si no los conocemos bien y los cuidamos, se pueden destruir, sobre todo en un territorio sometido a tanta presión como el balear», señala. «Queremos que la ciudadanía conozca su propio territorio y la identidad de las Islas», añade el diputado. El inventario de lugares de interés geológico está «vivo», según Jiménez, y sujeto a nuevas incorporaciones que pueden presentar instituciones o asociaciones profesionales.