El clan de 'Los Manzano' da un ultimátum a 'Los Pelúos' para que abandonen Mallorca
La investigación apunta a que la víctima fue tiroteada en la calle y se refugió en su casa
Decenas de agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local de Palma blindaron las calles de la barriada de Son Gotleu nada más producirse el tiroteo. | Alejandro Sepúlveda
Máxima tensión en las calles de la barriada de Son Gotleu de Palma. Un enfrentamiento entre dos clanes gitanos está generando un clima hostil, violento y de auténtico terror en la zona. El clan de ‘Los Manzano', lanzó un ultimátum a ‘Los Pelúos', «Os queremos fuera de la Isla o ateneos a las consecuencias», gritaron los tiradores mientras abandonaban el lugar del suceso.
A media tarde del martes, se produjo un tiroteo en las inmediaciones de las calles Santa Florentina y Sant Fulgenci donde una persona resultó herida de gravedad con arma de fuego. Las primeras investigaciones apuntan a que cuatro integrantes del clan de ‘Los Manzano' se bajaron de una furgoneta –de color gris– provistos con armas de fuego abriendo fuego en repetidas ocasiones contra un hombre, de 29 años, miembro del clan de ‘Los Pelúos'. La víctima, herida de bala y sangrando de forma abundante, fue perseguida durante unos metros por sus atacantes hasta que consiguió refugiarse en su domicilio. Una vez allí, el clan rival no tuvo ningún reparo en seguir disparando contra la vivienda. En su interior, se encontraban seis personas, entre ellas, la esposa del herido que tenía a su hijo pequeño en brazos. Los testigos señalan que las balas rozaron a la criatura.
Los vecinos no cesaban de gritar y los pistoleros no dudaron en abandonar la vivienda apresuradamente cuando escucharon las primeras sirenas policiales.
La víctima recibió tres impactos de bala, dos en la espalda y un tercero en una pierna. Afortunadamente, los impactos de los proyectiles no lograron alcanzar a ningún órgano vital. En la mañana de ayer, el paciente fue dado de alta médica y se está recuperando en su domicilio. La Policía Nacional y la Policía Local de Palma acordonaron toda la barriada y se puso en marcha la ‘operación cerrojo'. Se aumentó la vigilancia y controles en puertos y en el aeropuerto de Son Sant Joan con la intención de evitar la fuga de los tiradores.
Paralelamente, decenas de agentes –uniformados y de paisano– están patrullando las calles de Son Gotleu y protegiendo las viviendas, mientras la policía trata de localizar a los agresores. Los mismos se enfrentarán a una acusación de tenencia ilícita de armas y homicidio en grado de tentativa, además de otro de daños.
Ambas partes sostienen que el detonante del enfrentamiento se produjo por un tema de una okupación de vivienda y por la venta de un coche. Fuentes próximas al caso a las que ha tenido acceso Ultima Hora sostienen que estas versiones no se sostienen y no dan ninguna credibilidad a las mismas. La investigación sigue abierta y no se descartan detenciones en breve.
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