Uno de los testimonios más reveladores y dramáticos lo aporta una de las vecinas del Camí Vell de Costitx, que junto con una piloto de la compañía EasyJet y otras personas acudieron en auxilio de las posibles víctimas.
«Me encontraba en el interior del jacuzzi y estaba mirando el cielo hacia la zona de Sencelles-Costitx. En ese momento observé como un primer helicóptero de color oscuro y pequeño estaba sobrevolando mi finca dirección Tramuntana. Al cabo de menos de un minuto, observé como otro helicóptero estaba haciendo el mismo trayecto. A una distancia de la vivienda de unos 300 metros, pude ver desde la dirección del aeródromo de Binissalem una avioneta de color blanco dirección Alcúdia», apunta la vecina. En las diligencias consta que «la dicente observa cómo la avioneta viene por su lado derecho y el helicóptero justo de frente. Ninguno de los dos pilotos ve al otro aparato, hasta que a escasos metros de distancia el uno del otro, parece que ambos pilotos se dan cuenta de la presencia de la otra aeronave». Fue entonces cuando «el helicóptero se encontraba en la zona superior y realizó un giro hacia su lado derecho y bajó. La avioneta que iba por la parte más baja del helicóptero al pasar por debajo de este da velocidad y elevó su morro. Acto seguido, se produjo la colisión mortal», se recoge en las diligencias.
«Al observar que el helicóptero se iba a estrellar muy cerca de mi posición, salí del jacuzzi corriendo y me refugié dentro del porche de mi casa. No pude ver el impacto de la aeronave contra el suelo, pero sobre mi finca iban cayendo trozos del aparato. En mi vivienda residen dos amigos de los cuales una chica es piloto de avión de EasyJet. Salimos todos corriendo hacia el lugar del impacto, a unos 20 metros de una vivienda. Al llegar, me quedé más retrasada y la piloto y su pareja se acercaron al aparato siniestrado. Cuando se encontraban a escasos metros del helicóptero, la piloto detectó la presencia de queroseno y gritó a los allí presentes: ‘Queroseno, va a explotar'», señala en su testifical.
Los tres testigos se alejaron del lugar y se refugiaron detrás de un gallinero. Justo tras situarse tras la pared del citado gallinero, el helicóptero explotó de manera violenta y a escasos segundos se registró una segunda explosión, esta de manera más leve.
«De la primera explosión puedo decir que fue muy grande y que llegamos a percibir una onda expansiva. Tras esto, fuimos a buscar manguera y cubos para tratar de apagar el fuego. En cuestión de segundos, cinco o seis vecinos llegaron con cubos y comenzaron a lanzar agua».
Testifical
Pablo Ruiz, jefe de vuelos del aeródromo de Binissalem, lugar desde donde despegó la avioneta siniestrada, testificó en sede policial que «según lo escuchado por los testigos presentes, el helicóptero volaba bajo y con lo que respecta a la aeronave hacia un vuelo recto hacia Alcúdia que se demuestra que llevaba la altura correspondiente. Que no se vieran implica que el piloto del helicóptero volaba por debajo de la avioneta».
Causas
Neal Meter, piloto de helicóptero compañero de Cedric Leoni (fallecido), contactó instantes antes del siniestro y éste no le comentó nada sobre si su aeronave tuviese algún tipo de problema técnico. Para el profesional, el espacio en el que tienen que volar es entre 500 y 1.000 pies, siendo un espacio muy estrecho, con poco margen de maniobra y saturado por aeronaves ligeras que no están obligadas a tener una emisora operativa.
Piloto comercial
La piloto de avión que presenció los hechos entiende que «es algo habitual ver aeronaves sobrevolando la zona. La mayoría vuela a una altura de 300 a 600 metros más o menos. Yo trabajo como piloto de vuelos comerciales y creo que es una altura razonable para una zona poco urbanizada. Quizá volara bajo para no invadir la zona aérea controlada que utilizan los aviones comerciales para aterrizar en Son Sant Joan»
5 comentarios
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@ Jose. Y tu sabiduría no tiene límites, es equiparable a la sabiduría del 99 % de los cretinos.
El 99 por 100 de los aviones que se estrellan explotan, que mujer más lista. Es un lince.
Menos mal que después de tres meses han llegado a la conclusión de que los pilotos no se vieron..... ya estamos tranquilos.
Todavia le dan vueltas a lo mismo a pasado y ya esta al igual a los famiiliares no les gustara volver a ver esta noticia
los testigos no son fiables,es mejor valorar las pruebas