Entreno del mallorca en golf Son Quint. | M. À. Cañellas

Javier Arizmendi vuelve a sentirse futbolista al cien por cien. Después de un año para olvidar en el Neuchatel y en el Getafe donde vivió situaciones de máxima tensión en el primero y donde apenas tuvo protagonismo en el segundo, ahora llega el momento de volver a la palestra y de reivindicarse de nuevo en la mejor Liga del mundo.


Cuando se cumplen nueve días desde que llegó a la Isla, el futbolista ya sabe en qué vestuario se encuentra y está comprobando, como dijo Caparrós, que el ‘factor humano' es uno de los aspectos más destacables de la caseta de su nuevo equipo. «Conocía al cuerpo técnico y ahora me encuentro con unos nuevos compañeros que me están haciendo la adaptación mucho más fácil», manifestó el jugador madrileño.


Con 185 partidos a sus espaldas en Primera División, el curso pasado experimentó la cara más confusa del fútbol por su experiencia en Suiza y también la más desagradable, al verse sin opciones en el Getafe. Por todo, ahora se siente con más fuerzas que nadie para recobrar todo su instinto. «Lo que quiero es jugar, después de lo vivido el año pasado donde no pude disfrutar de minutos ni del juego que quiere todo futbolista. Quiero volver a jugar, ser útil al equipo y sentirme integrado», comentó Arizmendi.

Para jugar tendrá que convencer a su entrenador, pero para integrarse se está comprobando esta semana de duro trabajo como el jugador es uno más ya del grupo. De hecho, es muy fácil integrarse en este vestuario porque la plantilla ayuda siempre al máximo a los nuevos refuerzos. Ahora viene lo más complicado, adaptarse al juego y a la libreta de Caparrós en este equipo, pero Javier tiene recursos suficientes para poder avanzar este periodo. «Jugaré donde el entrenador lo crea oportuno. Él sabe que puedo actuar en diferentes posiciones y como he dicho, mi principal deseo es volver a jugar y poder ayudar al equipo», indicó Javier Arizmendi.


En el capítulo de objetivos, el futbolista apuntó que este equipo tiene mimbres suficientes para poder superar lo conseguido la pasada campaña. «Vamos a trabajar para mejorar lo conseguido la pasada temporada. La afición está muy contenta con el rendimiento que ofreció el equipo y repetir lo hecho sería magnífico.

Los aficionados se lo pasaron muy bien y el equipo también disfrutó mucho», recordó el futbolsita del Mallorca, que pudo llegar en el mercado de invierno pasado, pero que no ha sido hasta este verano cuando se ha incorporado al club balear, cedido por el Getafe.

Arizmendi recordó que no por ser un fichaje especialmente recomendado por el entrenador, esto le hará jugar de titular todos los partidos. «Todos partimos de cero, el entrenador puede tener unas ideas, pero todo puede variar en función de cómo marchen las cosas. Como he dicho, todos partimos de cero desde el más veterano al más joven», dijo.

Arizmendi reconoció que esta semana de duro trabajo se está notando ya en las piernas de los futbolistas, hasta el punto de que incluso «cuesta hasta descansar». Los futbolsitas han estado sometidos a una disciplina de entrenamientos muy dura desde que el pasado sábado empezó la pretemporada y las sesiones en el campo de golf y en la playa de Can Pere Antoni empiezan a pasar factura a pocas horas de viajar a Holanda para realizar el stage.