Medori, lanzando a canasta, durante el partido. | SA REAL

El Sa Real Instalaciones Arévalo sumó un importantísimo triunfo, el segundo consecutivo, ante el Roser (79-65). Los colegiales fueron de menos a más en este primer encuentro de la segunda vuelta para acabar teniendo una victoria tranquila y salir de las posiciones de descenso.

El primer cuarto fue un intercambio de golpes entre dos equipos que atacaban mejor que defendían. Ambos estaban entonados de cara a la canasta y los primeros diez minutos se esfumaron con un tanteo elevado en el que los visitantes salieron vencedores (26-27).

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El segundo cuarto fue todo lo contrario. El acierto desapareció por completo costaba un mundo hacer una canasta. También hubo bastantes pérdidas y, así, al descanso se llegó con el 35-40 en el luminoso. Sólo nueve puntos para el cuadro ibicenco que tenía que reaccionar.

Lo hizo. En el tercer cuarto salió la mejor versión de los colegiales que no tardaron en darle la vuelta al marcador. No sólo eso, también empezaron a abrir hueco para cimentar la victoria. El 56-49 con el que se llegó a los últimos 10 minutos no era ni mucho menos definitivo, pero sí dejaba claro que habían cambiado las cosas.

En el último cuarto, la victoria no llegó a peligrar en ningún momento. El Sa Real supo tirar de experiencia para amarrar un triunfo que les permite salir del descenso y empezar la segunda vuelta con energía.