La SD Ibiza ha caído este domingo ante el Cornellà (0-1). Los ibicencos no han estado finos ante un rival que supo defender su ventaja con todo. Las imprecisiones y las prisas condenaron a los rojillos que caen a puestos de descenso.
El partido empezó con dos equipos que se medían sin arriesgar demasiado. Más juego directo que combinado y los minutos cayendo a la espera de la primera ocasión de peligro. Esta no llegó hasta el minuto 21, cuando Perales se hizo enorme para solventar el grave error de Lavsamba. El guardameta sacó un mano a mano tras una grave pérdida del centrocampista en l salida de balón.
Antes, lo había intentado el Cornellà por banda derecha, en una acción que acabó siendo sencilla para Perales; y la SD Ibiza con un par de saques de esquina. También al cuarto de hora había sido anulado un gol de Navalón por fuera de juego.
Con el paso de los minutos, parecía que los catalanes cada vez estaban más cómodos ante un conjunto ibicenco que tenía muchos problemas para tener el balón. Demasiadas imprecisiones en el centro del campo rojillo.
En el 35, llegó la más clara de los de Vila. En una buena acción colectiva, el balón le llegó a Marquitos que centró raso, buscando a Navalón, quién estuvo a punto de hacer el primero. Poco después, Bengoechea y Mario Riquelme probaban suerte con sendos disparos lejanos que no crearon muchos apuros a Miño.
Fue lo último reseñable de una primera parte de poco fútbol y muchas imprecisiones. La segunda sólo podía mejorar. Al descanso, Casañ hizo un cambio ofensivo y retiró a Bengoechea para dar entrada al nuevo fichaje Juan Delgado.
La segunda parte empezó mal. En el 49, Perales no pudo bloquear un lanzamiento de falta y en el rechace hizo penalti al intentar hacerse con el balón. Mateo no desaprovechó el regalo y puso el 0-1 desde el punto de penalti. Tocaba remontar.
La SD Ibiza intentó responder por la vía rápida, pero el disparo de Lecea desde la frontal no encontró portería. Tampoco lo hizo el lanzamiento de falta de Marquitos.
Los minutos iban cayendo y los rojillos no eran capaces de hacer daño a un Cornellà ordenado. Había muchas impresiones y poca velocidad en el juego de los ibicencos. En el 74, la tuvo Juan Delgado, pero su cabezazo se encontró con una buena intervención del portero visitante.
Los de Vila embotellaron a los catalanes que repelían una y otra vez los centros. No encontraban el camino los de Casañ. En el 86, el disparo de Riquelme desde la frontal se fue cerca del palo. Se le acababa la vida al cuadro pitiuso.
En el descuento, la fortuna no estuvo del lado ibicenco. Un rebote en un despeje acabó golpeando en el larguero para desesperación local. No hubo manera y la derrota se confirmó.
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