Cierran el campo municipal de Sant Antoni tras desprendimientos en los vestuarios

Las primeras inspecciones, por parte del departamento de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento, revelaron «patologías de corrosión en armaduras y grietas en elementos de las estructuras portantes». Ante esta situación, desde un primer momento, se iniciaron actuaciones de saneo para evitar nuevos desprendimientos. Sin embargo, durante el seguimiento y evaluaciones posteriores, se han detectado posibles deficiencias en elementos estructurales, lo que ha indicado la necesidad de realizar un estudio de diagnóstico estructural en profundidad.

A través de dicho estudio, que se contrata a una empresa especializada por la vía de emergencia, se llevará a cabo una evaluación exhaustiva y completa del estado actual, lo que permitirá verificar las condiciones de seguridad de la estructura existente y determinar las intervenciones necesarias a seguir.

Como medida preventiva, el Ayuntamiento ha decidido precintar las instalaciones hasta que se obtengan los resultados del estudio, que previsiblemente se prolongará durante dos meses.

Desde el Ayuntamiento de Sant Antoni, se pretende dar máxima prioridad y urgencia en la resolución de esta situación para garantizar la seguridad de todos los usuarios de las instalaciones deportivas. Por ello, se ha aprobado una partida en el último pleno, proveniente de los remanentes, para poder actuar de inmediato con un contrato de urgencia.

El Ayuntamiento ya está trabajando para habilitar de forma temporal espacios modulares para acoger las diferentes dependencias de las instalaciones, como vestuarios, almacenamiento de material, lavandería, enfermería y cafetería, durante el tiempo que esté restringido el acceso a las gradas. También se ha buscado un nuevo espacio para los usuarios de la escuela de verano de la SD Portmany, y este lunes se ha dado la autorización para que sean trasladados al edificio del Centro Cultural de Cervantes a partir de este martes.