Por todos era sabido que se iba a negociar la renovación del convenio, pero lo cierto es que la actual situación clasificatoria de la Udé podría trastocar todo. La entidad celeste cuenta con la instalación en exclusividad, pero si baja a Primera RFEF verá automáticamente finalizado el contrato que tiene con el Consistorio. Así las cosas, sobre el papel, la gestión del estadio se asemejaría más a la de la era anterior al ascenso de la UD Ibiza a LaLiga SmartBank que a la actual.
El conjunto celeste es el colista de Segunda y se encuentra a 11 puntos de la zona de permanencia tras la disputa de 28 jornadas. La salvación es posible mientras que las matemáticas no digan lo contrario, si bien las sensaciones y los resultados cosechados, con sólo cuatro victorias y una en los últimos 20 partidos, no son precisamente halagüeños.
Amadeo Salvo, presidente de la UD Ibiza, aseguró a mediados de diciembre del año pasado que el nuevo convenio debía estar listo en marzo. El máximo mandatario unionista comentó en una rueda de prensa que «el mundo profesional te exige mucho a nivel de infraestructuras», donde se encuentran «limitados», y se deben poner en marcha las mejoras desde entonces con el propósito de que estuvieran listas para la próxima temporada. El mandamás unionista indicó que ha de presentar una documentación a LaLiga en esas fechas sobre donde jugará y que la renovación del convenio se debía producir antes de las elecciones.
Estas afirmaciones llegaron semanas después de que, en el debate del estado de la ciudad a finales de octubre, desde el PP se pidiera a Rafa Ruiz, alcalde de Vila, que esperase a las próximas elecciones para que sea el equipo de gobierno ganador el que aborde la cesión de uso de Can Misses. «No firme el convenio antes de salir del Ayuntamiento. Déjelo al equipo de gobierno que venga. Si es usted, lo prorroga tranquilamente y, si somos nosotros, ya veremos si lo prorrogamos, seguramente también. No adopte la decisión y déjela al nuevo equipo de gobierno», dijo José Vicente Marí Bosó por entonces.
El convenio actual expira el 30 de junio del presente año, tal y como se refleja en el apartado de vigencia. Además, indica que «se podrá prorrogar de forma expresa por periodos sucesivos de un año, durante dos años más, previo acuerdo entre las dos partes, siendo la duración máxima de vigencia del convenio de cuatro años».
Asimismo, este punto también recoge que «en caso de descenso de categoría, el presente convenio quedará sin efecto de forma automática una vez finalizada la temporada en la que se produzca dicho descenso», es decir, el último fin de semana de mayo.
5 comentarios
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AchelooEso es partir de la base de que esas personas son lerdas y no saben diferenciar apoyar un equipo de fútbol de un alcalde al que le da igual hablar y se cree que está por encima de la ley. No cuela. Por otro lado, el negocio urbanístico que la UD tenía previsto, parece que se acaba.
NnMás de 4000? PuffffJAJAJAJAJAJA Entre el CD Pitiusas y el club de atletismo no llenáis ni un minibús. Se acabó de vivir de las subvenciones. Poneos a trabajar.
Había que firmar cuanto antes, porque cierto tiempo antes de las elecciones no se pueden tomar acuerdos y tanto Rafa como la UD tienen claro que no va a repetir en la Alcaldía
AchelooTambién te digo que los que le tenemos asco a la UD somos más de 4000
No sabéis la cantidad de votos que iba a perder el PP por ponerse en contra de la UD. Ibiza. 4000 socios/votantes.