El público que se acercó al polideportivo ibicenco pudo disfrutar de una tarde tranquila. Desde el principio quedó reflejada la diferencia que había entre los dos equipos. A los naranjas les costó entonarse en ataque al marcar sólo cinco goles en los primeros 15 minutos.
La defensa funcionó bien, pero la falta de efectividad impidió que los locales se disparasen en el marcador. El paso de los minutos sentaron bien a los hombres de Tilves, que poco a poco se entonaron y empezaron a abrir brecha.
Liderados por el fichaje de esta temporada, Javier Aragón, los goles fueron entrando y la distancia fue en aumento. Al descanso la renta era de cinco tantos (13-8) y la tranquilidad era palpable.
El arranque del segundo tiempo sirvió para que la distancia aumentase aún más. A los diez minutos, el 20-12 finiquitaba el encuentro. Eugenio Tilves aprovechó la situación para dar minutos a los jugadores menos habituales y descanso a los hombres más importantes de la maquinaria naranja.
Al término del encuentro, el entrenador gallego se mostró contento por lo visto sobre el parqué: «Fue un partido bastante tranquilo en el que fuimos superiores». «Hemos defendido bien y corrido al contraataque», explicó.
Tilves no quiso detenerse mucho más en analizar el duelo y aseguró que tocaba ponerse a pensar ya en el siguiente partido, que será en la pista del Petrer.
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