Un lance del partido disputado entre el Formentera y el Calvià en Sant Francesc. Foto: SD FORMENTERA

El Formentera pasó ayer a la segunda ronda de la Copa Federación tras empatar sin goles en Sant Francesc ante el Platges de Calvià. Los de Iván Gómez hicieron bueno el triunfo cosechado en la ida (1-2) y se verán las caras con la Peña Deportiva en la segunda eliminatoria.

Iván Gómez, al igual que en el duelo de ida, movió el once y dio entrada a jugadores que están teniendo menos minutos en liga. Con una alineación llena de juventud, el Formentera salió bien plantado ante su público. El Calvià hizo lo propio y en los primeros minutos el respeto fue la nota dominante. Apenas hubo acercamientos a ninguna de los dos áreas.

Los primeros en probar suerte fueron los mallorquines. En el minuto 20, un tiro potente obligó a intervenir a Uri bajo palos. La réplica la puso Manu Torres, pero en este caso fue la defensa quien bloqueó el intento rojinegro.

Un lanzamiento de falta del Calviá y poco más ofreció el resto de los primeros 45 minutos. El marcador al descanso clasificaba a los formenterenses, por lo que las prisas estaban en el otro lado del campo.

En el segundo acto, el Formentera salió con fuerza. Primero Bonilla con un cabezazo y después Mourelo con un remate que lamió el palo, pudieron marcar el primer tanto del partido.

Los minutos fueron cayendo y el marcador no se movía. Los dos entrenadores hicieron pronto todos sus cambios, pero en el terreno de juego todo siguió igual. Mourelo volvió a gozar de una buena ocasión en el minuto 68. Y tres minutos después, Carlos Teral obligó al portero visitante a hacer una gran parada con un disparo lejano.

En la recta final el Calvià pudo darle emoción al encuentro, pero no estuvo acertado. En el 87, Ferreres derribó a un atacante mallorquín y el árbitro señaló el punto de penalti. Pacheco tomó la responsabilidad. Lanzó y Uri adivinó para detener el balón y mantener el empate.

El penalti errado mató el partido. El Formentera vivió con tranquilidad los últimos minutos sabedores de que tenían una renta amplia para pasar a la segunda ronda.