El CN Sant Josep se proclamó ayer campeón de Balears por primera vez en su historia. Los ibicencos consiguieron darle la vuelta a la final contra el Ciutat de Palma. Tras perder en Mallorca (7-6), en su casa, los josepins se hicieron con el triunfo (6-4). En el desempate, a los penaltis, el centenar de aficionados que abarrotó la piscina, estalló de alegría ante la tensión del momento.

El partido no fue fácil. En el primer cuarto, los mallorquines se adelantaron. El 1-2, hacía pensar en lo peor. La experiencia de los visitantes, que están acostumbrados a jugar este tipo de partidos, volvía a asustar.

Los locales supieron rehacerse y darle la vuelta antes del descanso (3-2). El partido se decidió en el último cuarto al que se llegó con un marcador de (4-4).

En la tanda de penaltis, tras fallar los dos equipos uno, en el quinto y último lanzamiento, Ciutat falló. Y con toda la presión, Sant Josep anotó y se llevó el campeonato.