Bruno Grassi pasa la pelota durante el trepidante partido entre el Gasifred Atlético, líder de Tercera, y el Muro, vigente campeón, hace menos de un mes.

La selección balear ha puesto sus miras en Bruno Grassi Roig. El buen hacer y la gran temporada que está haciendo el jugador del Gasifred Atlético son aspectos que no han pasado desapercibidos para Juan Pedro Ortega Martínez, seleccionador autonómico y coordinador juvenil del Palma Futsal, que contará con él el próximo mes en el entrenamiento en tierras mallorquinas preparatorio para el nacional.

El azulino es el único ibicenco que forma parte de la preselección y, salvo sorpresa, será uno de los fijos en el combinado balear, cuya preselección ya se ha dado a conocer. Sus cualidades son notorias y, además, cuenta con la total confianza del segundo técnico de la selección: su compañero de equipo y portero titular Iván Martín.

La verdad es que a Bruno no le sorprendió demasiado la llamada: «Ya me había comentado Iván que, como él va de segundo, que el seleccionador le había dicho que mirara juveniles y me ha tocado. Lo aprovecharé para seguir aprendiendo».

El ala-cierre vive su tercera temporada en el mundo del fútbol sala, todas en las filas del club que regenta Juan Ruiz, tras haberse desvinculado del deporte rey. Sobre su adaptación, indicó: «Al principio no notaba el cambio, pero con el tiempo sí que he aprendido distintos movimientos y es cierto que cambia la forma de jugar y todo. Con Luis Coria –su entrenador– he aprendido un montón». También tuvo buenas palabras hacia los jugadores azulinos: «Siempre me apoyan y siempre aprendes algo nuevo de ellos. Son muy buenos compañeros».

El del Gasifred, que se describe como «un jugador completo que puede hacer un poco de todo y jugar en cualquier posición», tiene los pies sobre la tierra y no quiere marcarse objetivos utópicos en este deporte. «Prefiero ir poco a poco y pensando en el presente. Lo que venga será bienvenido», comentó al respecto. Sí es consciente de que las cosas le están yendo bien en el plano individual y colectivo. «Hay partidos mejores y peores, pero estoy contengo con mi rendimiento», indicó el ala-cierre, que no ocultó su deseo de lograr el ascenso a la categoría de bronce al término de esta campaña. «La primera vuelta nos está yendo muy bien y estamos jugando bien. El último partido contra el San Pablo fue duro, pero sacamos los tres puntos, que es lo importante. Ojalá subamos a Segunda B y yo pueda seguir aquí», subrayó el diamante en bruto del Gasifred, una promesa que empieza a hacerse realidad.

LA NOTA

El Montesión, el club más representado

El Entreculturas Montesión es el club con más jugadores preseleccionados para la selección balear juvenil con un total de cuatro. Le siguen, con tres, el ETB Calvià, el Palma Futsal, el Recreatiu Manacor y el Son Oliva. El Campos aporta dos futbolistas, mientras que el Alcúdia, el Sineu y el Gasifred Atlético ceden uno.