El prestigio como base del éxito

El IV Campeonato de España Trial Ciutat d'Eivissa que se disputa este fin de semana en la Isla tendrá como puntos neurálgicos el Recinto Ferial, que acogerá el 'paddok' de la organización, a cargo del Motoclub de Formentera i Eivissa, y los entrenamientos de los pilotos participantes; y el parque Reina Sofía, escenario de la exhibición de BMX que ofrecerán Marcel Justribó y Jordi Pascuet, además de acoger la penúltima zona de la competición nacional.
Agustín Ribas, organizador de la segunda prueba del nacional, acompañado por el delegado de Trial de la Federación Española de Motociclismo, Jordi Prats, y de los responsables políticos Mar Sánchez y Rafa Triguero, presentaron ayer en Can Botino una edición marcada por los recortes institucionales. No en vano, la organización estima una reducción de unos 10.000 euros del presupuesto respecto al pasado año. Como apunte, Ribas recordó que la edición de 2009 llegó a contar con 60.000 euros, mientras que para este año la cifra no superará los 22.000.
Aún así, y gracias al esfuerzo del Motoclub y al prestigio que se ha ganado durante años la prueba ibicenca, han vuelto a depositar su confianza en el Trial Ciutat d'Eivissa algunos de los mejores pilotos del mundo, tales como Toni Bou, Adam Raga, Albert Cabestany o Laia Sanz.
La inscripción, que finalizó anoche, rondará los 50 participantes, un número inferior al esperado teniendo en cuenta, como recordó Jordi Prats, las dificultades que encuentran los pilotos para desplazarse a la Isla: «Lamentamos que el acceso y transporte no sea una cosa fácil. Parece mentira que un país como España que tiene islas, para venir hasta aquí sea como ir a la otra punta del mundo. Los pilotos tienen que venir el jueves y marcharse el lunes o el martes, y esto son inconvenientes. Aún así, entre 40 y 50 pilotos es una buena cifra. Desde la federación apoyamos esta prueba con todas nuestras fuerzas».
El conseller d'Esports d'Eivissa, Rafa Triguero, destacó el «esfuerzo y sacrificio» del club para sacar adelante la prueba porque, en su opinión, «las ayudas públicas no son la partida más importante del presupuesto y por ello han conseguido movilizar a empresas privadas para dar continuidad a este evento».
En lo que se refiere a cifras económicas, la competición moverá este año un presupuesto de «21.000 o 22.0000 euros», de los que 3.000 proceden del Consell y 5.500 del Ayuntamiento de Vila, «además de las infraestructuras» que ambas administraciones ceden a la organización. Agustín Ribas apuntó la colaboración del consistorio de Santa Eulària y, sobre todo, la aportación de 4.000 euros de la empresa de ocio Space Beach Club. «Nos ha salvado mucho, gracias a esto vimos que podríamos cubrir la prueba», explicó Ribas.