Sin salvación posible

PALACIO DE CONGRESOS (23+10+12+19): Pérez (3), Morales (10), De Kleijn (20), Egenti (12) y Denti (6) -cinco inicial- Bettonvil (0), Ávila (0), Tamara (5) y Barnert (8).
GRAN CANARIA (14+23+28+10): Romero (6), Moss (23), Lee (11), Ndour (2) y Blé (17) -cinco inicial- Montesdeoca (0), Mongomo (0), Argüello (16) y Ndoye (0).
Árbitros: González y López. Eliminaron por cinco faltas a la local Denti (minuto 25).
Incidencias: Pabellón de Santa Eulària. Apenas un centenar de espectadores.

El Palacio de Congresos de Ibiza todavía no está matemáticamente en Liga Femenina 2, aunque su descenso está casi consumado y sólo es cuestión de días que se haga realidad. La derrota ante el Gran Canaria (64-75), en la que se antojaba el último cartucho para las ibicencas, hace que las posibilidades del equipo a falta de tres jornadas para el final sean ínfimas, y sólo la victoria del Cadí La Seu ante el Obenasa Navarra por 70-63 evitó que se rubricara ayer mismo su defunción en la categoría.
El partido ante el Gran Canaria era el Partido, con mayúsculas. Las jugadoras locales eran conscientes de ello y saltaron a la pista a mil revoluciones, como si quisieran ganar por la vía rápida. Tras unas cuantas imprecisiones iniciales, el Palacio se fue entonando y cerró el primer cuarto con ventaja después de tres triples consecutivos de De Kleijn, Rosa Pérez y Morales.
Pero, si en el primer cuarto tocó cara, en el segundo salió cruz. Todo lo bien que había jugado el Palacio en los primeros diez minutos se transformó, como por arte de birlibirloque, en mal juego, nervios y faltas personales. El partido pasó entonces de un 25-14, máxima ventaja de las locales en el minuto 12, al 31-35 en el minuto 19 (6-21 de parcial) tras unos minutos desastrosos del conjunto ibicenco. La diferencia por entonces no era demasiado grande (33-37 al descanso) y aún había encuentro por delante.

En picado
No obstante, la reacción nunca llegó. Entre Vanessa Blé, Moss y Argüello se encargaron de aumentar la renta, que pronto llegó a los 20 puntos (38-58, minuto 26). Otro parcial de escándalo en ese tercer cuarto dejaba el marcador en un claro 45-65.
En los últimos diez minutos, con todo el ‘pescado' ya vendido, las jugadoras locales lograron maquillar algo el resultado y cerrar el partido con sólo nueve puntos de desventaja tras un 10-0 en los últimos instantes (64-75). Tras el pitido final no hubo tiempo para dramas ni para lamentos. El descenso es algo que planea en el pabellón municipal de Santa Eulària desde principios de temporada y no pilla a nadie por sorpresa. Todavía hay una mínima opción en las tres últimas jornadas pero todos, directiva, cuerpo técnico y jugadoras, saben que no hay nada que hacer, que este cuento de Liga Femenina ya se ha acabado.

El detalle: El martes o el viernes podría ser ya definitivo
El Palacio de Congresos de Ibiza puede descender ya matemáticamente este martes, con su partido en la pista del Jopisa Ciudad de Burgos (20,30 horas), equipo que esta semana se ha asegurado la permanencia en la categoría. En caso de victoria de las ibicencas, habrá que esperar al viernes, que es el día en el que el Obenasa recibe al Sóller Bon Dia! (19,00). En caso de victoria de las navarras ante las mallorquinas, el descenso ya estaría consumado a falta de dos jornadas.

Ortega: «Es una pena, pero para competir hace falta un mínimo»
Miguel Ángel Ortega reconoció ayer que el descenso a Liga Femenina 2 es prácticamente una realidad. «Ha sido una temporada muy complicada y hasta este momento hemos estado luchando por la permanencia, pero ya todo decidido. Quizá no hemos jugado bien, pero hemos intentado siempre hacer las cosas bien y con dignidad. Las jugadoras han hecho lo que han podido y estoy satisfecho con ellas», declaró. Ortega utilizó un símil para explicar los motivos de esta situación: «Esto es como una carrera de Fórmula Uno, donde necesitas unos mínimos, como tener un buen bólido. Es una pena, pero para competir nos ha faltado ese mínimo».

Morales: «Nos vamos con la cabeza alta»
Silvia Morales, capitana del Palacio de Congresos, reconoció que la temporada, que está a punto de acabar con el más que seguro descenso de categoría «ha sido muy dura en todos los sentidos pero, al menos, las jugadoras nos hemos dejado la piel en los partidos y nos vamos con la cabeza alta. El bajar de categoría es una situación desagradable, pero ya sabíamos desde hace tiempo donde estábamos y no hay que hacer ningún drama. Tenemos que seguir luchando hasta el final de la liga».

Rosa Pérez: «No había vivido nunca una situación así»
La base Rosa Pérez también dio por seguro el descenso. «No sé si es matemático o no, pero la situación es muy complicada. No sé que nos ha faltado esta temporada. Es una suma de factores: la categoría es muy exigente, ha habido varios cambios en la plantilla, y el tema económico pueden ser algunas de las causas. A nivel personal llevo muchos años jugando en Liga Femenina y no había vivido nunca una situación así. Es muy duro», declaró la jugadora.