El estado del terreno del Tsentralni, el frío reinante en Kazan y la calidad del rival, que se convirtió en el primer equipo en ganar al Barça esta temporada, serán tres de los inconvenientes con los que se encontrará hoy el equipo de Guardiola ante el Rubín, pero no los únicos.
El partido es importante para un grupo que está mucho más igualado de lo que se podía prever. Tres equipos (Barça, Dinamo de Kiev y Rubín) comparten el liderato con cuatro puntos; el Inter es último con tres. Pero además, el calendario es complicado. El Barça debe jugar dos de los tres partidos que le quedan lejos de casa, el último en Kiev, seguramente también en unas difíciles condiciones climatológicas.
Por una vez Guardiola dispone de la práctica totalidad de su plantilla para afrontar el partido. Sólo Dmitro Chigrinskiy, no inscrito en la competición, y el lesionado Gaby Milito están de baja. Así, la sorpresa en la expedición ha sido Dani Alves, que se ha recuperado mucho antes de la lesión muscular sufrida, aunque se desconoce si su estado físico le permitirá estar al máximo nivel.
Duda
Si Guardiola cuenta con Alves, el Barça podría recomponer su defensa, después de que Abidal esté en condiciones de jugar tras superar un problema en el codo. Otra cuestión a tener en cuenta es el estado físico de Henry. La alineación está en función de la presencia de Alves. Si juega el brasileño, Puyol jugará con Piqué en el eje defensivo; si no juega Alves, Puyol será el lateral derecho y el cuestionado Márquez jugaría de central.
En el centro del campo, Guardiola le dará fuerza a su equipo con Touré y Keita, a los que acompañará Xavi. Delante, Messi, Ibra e Iniesta parecen seguros.
Después del 1-2 conseguido en Barcelona, el Rubín continua con la moral por las nubes, aunque con los pies en el suelo. El equipo ruso dirigido por el turkmeno Kurbán Berdíev apenas variará la estrategia que tan buen resultado le dio en Barcelona, es decir, todos juntos detrás del balón, ahogando la salida del balón, presionando a la línea medular azulgrana.
Precisamente, esa táctica es la que permitió al Rubín proclamarse por vez primera campeón de liga en 2008 y ser actualmente el líder en solitario del campeonato ruso a falta de tan sólo cuatro jornadas. Respecto al anterior partido, el Rubín recupera al delantero titular, Bujárov y podría regresar el capitán Semak, pulmón del equipo, aunque la clave será el argentino Alejandro Domínguez.
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