El Expofinques Tanit recibe esta tarde (Es Pratet, 17,00) al Viladecans en un partido que podría significar el descenso matemático de las ibicencas. El conjunto que dirige Cathy Boswell, hundido en la última posición desde el comienzo de la temporada, está obligado a ganar los tres partidos que restan de competición y esperar el tropiezo del Irlandesas, algo que, a estas alturas, se presenta casi imposible. «Es muy difícil cambiar una racha tan negativa y, aunque creo que el equipo ha mejorado desde mi llegada, no se ha podido variar la dinámica. Las jugadoras son conscientes que este partido es la última esperanza y van a intentar darlo todo para, al menos, proporcionar alguna alegría a la afición», afirma Cathy Boswell, entrenadora del Expofinques Tanit.

Para Boswell, el Viladecans, equipo que, aunque pocas, aún tiene opciones a meterse en el play off por el ascenso, es un rival muy complicado, «pero se nos están dando mejor los equipos de arriba que los que son de nuestra propia liga. A ver si podemos hacer un buen partido y sumamos una victoria, porque mis jugadoras se lo merecen y también queremos darle una alegría a nuestra afición», añade la entrenadora norteamericana, que reconoce que de los tres partidos que aún faltan por disputarse, «nos conformaríamos con ganar uno. Si no es ante el Viladecans, espero que sea el de la próxima semana ante el Irlandesas, también en casa. Lo positivo es que el equipo, a pesar de la mala situación y de los resultados, sigue muy unido y con hambre de triunfos».