Lance del partido entre el EBE y el Rivas.

EBE Promociones 92 Rivas Futura 66 EBE PROMOCIONES (24+17+25+26): Thorburn (2), Morales (17), López (12), Rasmussen (20), Lyttle (13) "cinco inicial".También jugaron Navarro (6), Navarrete (5), Liljestrand (8), Pons (4) y Herradas (5).

Estadística: T2 63%, T3 33%, TL 85%.
RIVAS FUTURA (13+19+13+21): Antoja (7), Camps (0), Joens (8), Dubljevic (12), Sarenac (4) "cinco inicial" .También jugaron Pina (0), Argüello (2), Pavetic (8) y Antibe (14).

Estadística: T2 53%, T3 17%, TL 61%.
Àrbitros: Rodríguez Àvila y Fraile Carrasco. Sin eliminadas.
Incidencias: Pabellón municipal de Santa Eulària, unos 600 espectadores.
Rubén J. Palomo
El EBE Promociones volvió a protagonizar ayer un auténtico recital de baloncesto en el pabellón municipal de Santa Eulària. Las jugadoras del PDV lograron una nueva victoria de prestigio ante un rival, el Rivas Futura, que ofreció escasos argumentos pese a la calidad de su plantilla y su buena posición en la tabla. Las chicas de Jordi Fernández no sólo superaron a las madrileñas por 26 puntos, sino que pasaron una frontera poco habitual en el baloncesto femenino como son los 90 puntos. El PDV, que defendió la práctica totalidad del partido en zona, dispuso un marcaje férreo sobre Cathy Joens, ex del equipo anfitrión, y acabó desquiciada con 8 puntos y 0 de 3 en triples, su especialidad.

El choque comenzó como había terminado el duelo ante Ros Casares; es decir, con mucha intensidad en defensa y ataques elaborados y resolutivos. Una jugadora brilló en el primer cuarto por encima del resto: Kristen Rasmussen. La pívot norteamericana volvió a dejar clara su calidad y su alta anotación dentro de la pintura y se marchó con 11 puntos al segundo acto. Tras la canasta inicial de Nicole Antibe, el PDV le endosó un parcial de 9-0 que nunca pudieron enmendar. El Rivas se cargó de faltas, siete en el primer cuarto, merced a la superioridad del juego interior local, con Sancho Lyttle en plan estelar en la parcela reboteadora (14 al final del encuentro).

Comenzaba el segundo período con un 24-13 en el marcador que reflejaba la tónica del partido, pero el Rivas no quería tirarlo tan pronto y comenzó a trabajar. La entrada de Arantxa Novo dio frescura a sus ataques, y ahora fue el conjunto de Santa Eulària quien se hartó de cometer faltas, nueve en total. Se llegaba al descanso con nueve puntos de diferencia para las locales, 41-32, en un final de cuarto marcado por dos pérdidas de balón de Thorburn.

En la reanudación comenzó a abrirse la brecha. Al juego desequilibrante de Rasmussen y Lyttle se unió Silvia Morales, que repartió 6 asistencias en el encuentro y fue clave para que la diferencia se fuera a 21 puntos (66-45) al final del cuarto.

Con el Rivas fuera del partido y las locales con la intensidad intacta, el PDV se dio un festín de puntos en el que todas las jugadoras de la plantilla anotaron y se divirtieron. Que se prepare el Hondarribia.