La Sociedad Deportiva Eivissa continúa construyendo el proyecto de equipo que vuelva a ilusionar a su afición. La directiva, y sobre todo, la comisión ejecutiva encabezada por Marci Rojo, está teniendo un arduo trabajo en estos últimos días. Ayer se apalabró el fichaje del media punta del Villarreal B, Alberto Simón. Se da la circunstancia de que este jugador es hijo del técnico de la Peña Deportiva, Carlos Simón. El técnico valenciano no le da importancia a este hecho, aunque se muestra feliz por su hijo. «Me parece muy bien, porque después de que toda la familia estuviéramos en Ibiza, preferíamos estar toda la familia junta», aseveró.

El preparador del conjunto de Santa Eulària ve muy lejano el día que se tengan que enfrentar ambos equipos, aunque reconoce que tendrá «sentimientos enfrentados». Aun así, matiza que «como profesional tengo que desear que ganemos los dos partidos contra el Ibiza, y mi hijo deseará que sea al revés», dijo.

Para Simón, su hijo, futbolísticamente hablan do es «muy bueno, en el sentido de que es un futbolista de escuela -se formó en las categorías inferiores del Valencia-», puntualizó el técnico. Por otro lado, la comisión deportiva se reunió ayer con siete jugadores más para saber su intención de continuar, o no, en el club. Los jugadores que pasaron por Can Misses fueron: Víctor, Maikel, Juan, Juanma, Edu Páez y Julián Marcos.