La decimosexta edición de la Cursa de s'Indiot, organizada por el GE Botafoc y patrocinada por el periódicoUltima Hora Ibiza y Formentera, se decidió ayer al sprint con el triunfo final del corredor del Club Ciclista San Antonio Pedro Luis Ferrer, que entró en la línea de meta en la primera posición con un tiempo de 1h01'26'', imponiéndose en la llegada al ciclista del CC Santa Eulària David Leggett, que entró segundo con el mismo registro, y David Checa, que finalizó en el tercer lugar. Los tres corredores dieron tiempo a un grupo compuesto por alrededor de 45 unidades. La victoria en féminas fue para Carolina D'Amico, del Base Sport, con un registro de 1h09'53''. Un total de 600 participantes tomaron la salida, alrededor de 500 en la prueba grande y de 100 ciclistas en la prueba destinada a las categorías inferiores y de discapacitados.

Otro de los aspectos más destacados de la carrera, sobre un recorrido de 42 kilómetros, fue la múltiple caída que se produjo a la altura del kilómetro 10 con un pelotón de alrededor de 25 ciclistas afectados. Los más perjudicados en este percance fueron los corredores del GE Botafoc Cristóbal Gómez, que tuvo que ser trasladado en ambulancia con un fuerte golpe en el pómulo y pérdida de consciencia, y David Guasch, que sufrió golpes en las costillas, aunque ambos están fuera de peligro y se están recuperando con toda normalidad.

El desarrollo de toda la carrera, con salida en la avenida de Santa Eulària, transcurrió de forma lenta con intentos de fuga movidos, sobre todo, por los corredores del CC Santa Eulària, que se mostraron muy activos, y algún que otro movimiento de algún corredor del CC San Antonio, aunque todos ellos fueron neutralizados y sometidos a la disciplina del pelotón.

Los ciclistas participantes marcharon en grupo en los primeros kilómetros que se desarrollaron por la carretera en dirección a Santa Eulària.

La tranquilidad fue la nota predominante en el transcurso de la prueba hasta que se rompió con la caída de un pequeño grupo de corredores. A partir de entonces, el pelotón se partió y se produjo una selección de alrededor de 50 unidades que marcharon en grupo pasando por la rotonda de ses Mines en dirección a Sant Llorenç. Los intentos de escapada fueron numerosos, pese a que todos ellos no fraguaron.

Los favoritos de la prueba se fueron controlando y las fugas fracasaron una detrás de otra. Por detrás, el resto de ciclistas se disgregó en pequeños grupo. El pelotón principal aceleró el ritmo de carrera a medida que se iba acercando los kilómetros finales y los principales aspirantes al triunfo se fueron colocando en las primeras posiciones. El sprint final se inició al principio de la avenida de Santa Eulària donde estaba instalada la llegada donde Pedro Luis Ferrer su ley al sprint.