EFE-Valencia
El Pamesa Valencia consiguió una trabajada victoria ante el Casademont Girona, por 85-75, que le permitirá continuar como líder en solitario una semana más.

El cuadro local comenzó el partido dormido, con escaso acierto en sus acciones ofensivas y debilidad defensiva. Esta apatía le dio alas al Casademont Girona, que rompió el partido desde el inicio gracias principalmente al poderío bajo tableros de Darryl Middleton y Larry Stewart.

Los jugadores de Vukovic consiguieron enjugar la ventaja tras resolver sus problemas defensivos y se pusieron por delante en el marcador cinco minutos después, 20-19, momento en el que llegó la prematura tercera falta de Tanoka Beard que obligó a Vukovic a sentarle en el banquillo. No obstante el Pamesa se fue al descanso cuatro arriba, 41-37.

Miki Vukovic leyó bien el partido y comenzó la segunda con una defensa zonal para aprovechar el desacierto en el tiro exterior del Girona, lo que unido al fulgurante comienzo de su mejor jugador nacional, Nacho Rodilla, originó el despegue en el marcador del Pamesa, que en el minuto 25 ya ganaba por diez puntos de diferencia, 50-40.

De ahí hasta el final los Trifón Poch se fueron a remolque del Pamesa, sin perder nunca la cara al partido; pero cuando el Casademont se puso a seis, 68-62, dos triples de Berni Àlvarez lograban sentenciar el partido.

Por otra parte, el Barcelona y Adecco Estudiantes realizaron el mejor partido defensivo de la temporada, en el cual el Barcelona volvió a demostrar la extraña naturaleza que posee el equipo catalán, que a cinco minutos del descanso ganaba por quince puntos (9-24) y una hora después rumiaba el dolor de la derrota en el vestuario.