J.M.A./J.J.M.

Una retahíla de cargos por abusos sexuales consumados pesan sobre el matrimonio ibicenco detenido por la Guardia Civil como sospechoso de haber sometido a continuos abusos sexuales durante años a cuatro hijas de la pareja, agresiones en las que también presuntamente participó un francés que convivió con dicha familia durante al menos tres años y que supuestamente se dedicaba a echar las cartas del Tarot. Las víctimas, dos de ellas aún menores, comenzaron supuestamente a ser objeto de estos abusos cuando cumplían los 15 años.

José Juan S.N., de 51 años, y su mujer, Margarita María F.P., de 50, tendrán que sentarse en el banquillo ante la Audiencia Provincial para enfrentarse a penas que en su conjunto suman los 50 años de prisión. El fiscal ha pedido para el primero 37 años de cárcel por los múltiples delitos de índole sexual, también de maltrato, que se le imputan, así como 13 a su esposa, persona que, según la investigación judicial, participó no sólo consintiendo los abusos a sus hijas sino siendo parte de ellos con al menos tocamientos.

El amigo de ambos, el francés Pierre Marie O.S., de 54 años, también se juega por este caso otros 24 años de condena. Para el matrimonio, además, se ha solicitado la pérdida de la patria potestad, ahora suspendida.

Estas son las penas que ha elevado ante la Audiencia Provincial el ministerio público después de que se haya dado plena credibilidad al testimonio de los afectados y a una investigación judicial que se inició después de que la hija mayor del matrimonio, una mujer ahora de algo más de 20 años, interpusiera ante la Guardia Civil una denuncia en la que aseguraba de que su padre la había obligado a ella y a sus restantes tres hermanas a consumar relaciones sexuales completas.

La detención de la pareja se produjo días después y, tras ello, vino su inmediato ingreso en prisión. La familia, compuesta por el matrimonio, las cuatro hijas afectadas y un quinto varón, así como eventualmente por el sospechoso francés, tenían como último domicilio una caravana asentada en una finca del municipio de Sant Josep. Años antes, sin embargo, todos ello contaban con residencia en Vila.

Instrucción

El fiscal considera que el cabeza de familia cometió siete delitos, seis de abusos; su mujer, cuatro; el mismo número que se le imputa al francés Pierre Marie O.S.

Durante la instrucción del caso trascendió que José Juan N.S. negó los abusos pero sí reconoció haber maltratado a sus cuatro hijas porque «en casa -según declaró- las cosas son de esta manera». También se supo que Pierre Marie les decía a las chicas que era «Dios tras irrumpir en sus habitaciones y supuestamente las obligaba a que le hicieran felaciones y a que se sometieran a todo tipo de tocamientos.