El fiscal pidió ayer dos años y medio de cárcel para un magrebí que fue capturado por la policía a primera hora de la mañana del pasado 26 de abril cuando fue encontrado manchado de sangre, al igual que otro individuo, después una pelea de bar que tuvo lugar en un establecimiento de la avenida de España de Eivissa y en la que se usó una navaja. El otro implicado en la reyerta se enfrenta a sendas multas de 270 euros por faltas de lesiones y amenazas.

Los dos acusados negaron ayer en el juicio, celebrado en el juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, haber tenido una disputa entre ellos y manifestaron haber sido víctimas de un riña multitudinaria. Sin embargo, la policía, a su llegada y tras el aviso del desorden en el bar, sólo encontró a ambos individuos con señales de violencia.