La Guardia Civil instruyó diligencias contra el sospechoso tras denunciarse los daños en el vehículo de la afectada.

Un vecino del municipio de Santa Eulària acabó ayer en el juzgado de guardia después de presuntamente destrozar con un hacha el coche de una mujer que había estacionado en las proximidades de su domicilio, ubicado en la carretera de Santa Gertrudis, cuando creyó que este coche pertenecía a cuatro jóvenes que vio en las inmediaciones de su casa y de los que sospechó podrían intentar entrar en la vivienda para robar. El vehículo, sin embargo, pertenecía a una mujer que dijo haber tenido que abandonarlo por un fallo mecánico y que se quedó estupefacta cuando lo encontró completamente destruido.

El acusado, que tuvo que responder por este motivo por un delito de daños, se mostró en el juzgado muy arrepentido por lo ocurrido y dijo haber tenido «un pronto» cuando pensó que iban a asaltar su casa. Se da la circunstancia de que dicha persona relató también que anteriormente había sido víctima de varios sucesos similares, motivo por el que rápidamente relacionó la presencia de los chichos con el coche.

El suceso tuvo lugar en las cercanías del kilómetro 7 de la carretera que une Santa Eulària con Santa Gertrudis. Las cuatro personas que provocaron la furia del acusado abandonaron el lugar sin que pudiera despejarse esta duda.

Los daños ocasionados en el vehículo, un turismo antiguo de la marca Volkswagen que su propietario intentaba reparar para venderlo, fueron de gran importancia. El vecino implicado en este suceso, por ello, tuvo que enfrentarse a una acusación por delito de daños en la que el fiscal pidió una pena de nueve meses demulta a seis euros diarios, así como a hacer frente a la responsabilidad civil. En caso de que aceptara esta condena la pena se reduciría en un tercio.