Golpes en la cabeza y estocadas en el muslo. Estos son los tres palos de sombrilla que los agentes de la Policía Local de Santa Eulària intervinieron. Dos de las víctimas recibieron fuertes golpes en la cabeza y la tercera, una mujer, una estocada de 4 cm en el muslo.

Golpes en la cabeza y estocadas en el muslo. Estos son los tres palos de sombrilla que los agentes de la Policía Local de Santa Eulària intervinieron. Dos de las víctimas recibieron fuertes golpes en la cabeza y la tercera, una mujer, una estocada de 4 cm en el muslo.

J. J. Monerri18/02/09 0:00
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Los tres acusados debían de haber sido juzgados ayer por unos hechos ocurridos en la playa de es Canar, en los que se utilizaron como armas palos de sombrilla, pero la vista oral no se pudo celebrar porque la principal víctima, un hombre que estuvo varios días en coma, no pudo viajar hasta Eivissa para poder declarar. Su abogado logró un aplazamiento y los sospechosos, presos desde el suceso, volverán a ser excarcelado el 31 de marzo para comparecer de nuevo ante la juez Martina Rodríguez, titular del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa y magistrada que debe resolver este caso.

Otros dos turistas alemanes resultaron heridos en la reyerta iniciada, al parecer, después de que uno de los sospechosos hubiera querido bailar con la novia de uno de los afectados cuando todos ellos coincidieron casualmente el pasado 23 de septiembre en una discoteca de la misma es Canar. Dos de los hombres recibieron fuertes golpes en la cabeza con tubos de hierro, perdiendo el conocimiento uno de ellos. La tercera víctima, mujer de uno de los anteriores, tuvo que ser atendida también en el hospital después de que presuntamente uno de los implicados, todos ellos de nacionalidad rumana, clavara en el muslo de ella uno de los palos de sombrilla que portaban, «armas» que fueron intervenidas por la Policía Local de Santa Eulària.

Los tres acusados habían protagonizado supuestamente en otras ocasiones altercados y disturbios en la zona, especialmente por peleas con otros turistas.

Según el escrito fiscal, en el que se piden respectivamente para cada uno de los acusados penas de cinco, cuatro y tres años de cárcel por cada una de las agresiones actuaron «de forma sorpresiva» aprovechando «la oscuridad y la soledad del lugar».

La investigación durante la instrucción determinó que la principal víctima quedó tendida en la arena tras ser atacada por dichos individuos, momento en el que también fue golpeado en la cabeza otro hombre que le acompañaba. Al mismo tiempo, la mujer de uno de los heridos sufrió un agujero de cuatro centímetros en el muslo al salir en defensa de su pareja y ser agredida con el palo de una sombrilla.