La policía busca a un rumanos y un español por oleada de atracos

El último atraco del que se tiene noticia lo cometieron los rumanos el pasado jueves en la tienda de lencería Women's Secret, en la avenida Ignasi Wallis de Eivissa. Fue sobre las nueve y media de la mañana. Esperaron a que la encargada abriera el local y mientras uno de ellos se quedaba vigilando en la puerta, el otro amenazaba verbalmente a la dependienta para que le diera el dinero, varios miles de euros, ya que el día anterior habían comenzado las rebajas. Una vez conseguido el botín, ataron de pies y manos a la trabajadora y la dejaron encerrada en uno de los probadores. Actuaron desarmados, sin guantes y a cara descubierta.

Unas semanas antes un español atracó con una navaja un establecimiento de venta de prensa del centro de la ciudad. Fue sobre las ocho y media de la tarde, cuando la única empleada del local se disponía a cerrar. La amenazó con la navaja y la obligó a entregar el dinero de la recaudación del día. El atracador era español y, aunque llevaba una capucha blanca, actuó a cara descubierta.

Un día de antes de este atraco se produjo otro en una mercería muy cercana al establecimiento de venta de periódicos y revistas. Un español, posiblemente el mismo que atracó al día siguiente el local de prensa, entró a la mercería también a la hora del cierre. Primero preguntó por un producto y se fue. Poco después regresó y amenazo a la dependienta con la navaja, que le entregó la recaudación del día.

En un establecimiento de la calle Pere Francés de Vila se produjo otro asalto similar, al igual que en otro local comercial de Puig den Valls. Todos los locales han presentado denuncias por los atracos y por el momento no hay detenciones. Algunas de las dependientas aseguran que tienen «miedo por lo que pueda pasar» y denuncian que ven poca presencia policial. En ninguno de los atracos se han registrado heridos.