AGENCIAS

El sindicato de pilotos españoles (SEPLA) pidió ayer la «máxima prudencia» en el análisis de las posibles causas que pudieron haber causado el trágico accidente aéreo de un vuelo de Spanair en el Aeropuerto de Madrid Barajas con destino a las Palmas de Gran Canaria.

En un comunicado, recordó que dada la «complejidad» de este siniestro, «será necesario esperar a las labores de investigación de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC), dependiente del Ministerio de Fomento», con el fin de conocer las razones por las que se originó el accidente del avión. Por otro lado, el SEPLA, cuyo presidente del comité de empresa en Spanair es Javier Navas, manifestó que la tripulación del aparato accidentado estaba «perfectamente cualificada» y añadió que también estaba acreditada su «gran experiencia» en el manejo del modelo accidentado, un MD-82. Finalmente, los pilotos expresaron su condolencia por las víctimas y sus familiares y se mostraron «profundamente consternados» ante la trágica noticia.

Por otra parte, por la mañana, antes de que ocurriera el accidente, el sindicato advirtió de que convocaría una huelga legal ante la Autoridad Laboral en caso de que la dirección de la compañía continuara pretendiendo «imponer» el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) «al margen de lo que recogen los convenios colectivos de sus trabajadores, evidenciando con todo ello su falta de voluntad real de diálogo».

En un comunicado, Sepla-Spanair criticó la «indefinición» del denominado Plan de Viabilidad propuesto por la dirección de Spanair, dado que, a su juicio, «no garantiza el futuro de la empresa y supone una prolongación del modelo gestor aplicado con tan malos resultados durante los últimos años».

El SEPLA estima que el Plan de Viabilidad incluido dentro del ERE (presentado el pasado 8 de agosto y que contempla la extinción de 1.062 empleos) es únicamente un «plan de ahorro inmediato de costes, en el que para nada se trata el futuro de la compañía».