VANESSA DÍAZ

La segunda movilización llevada a cabo ayer frente a los Juzgados de Eivissa contó con la presencia de una arquitecta del Ministerio de Justicia que visitó las instalaciones para comprobar, de primera mano, el estado en el que éstas se encuentran, algo que el propio Juan Nieto, portavoz del sindicato CSI-CSIF, calificó de positivo.

Éste se mostró conforme además con una de las soluciones que se están barajando para paliar el problema actual, que consistiría en dotar a las oficinas de aparatos móviles de aire acondicionado. Sin embargo, Nieto insistió en que hasta que el problema no se haya solucionado por completo, los funcionarios seguirán adelante con los paros de veinte minutos acordados cada martes y jueves.

El segundo parón fue secundado por todos los funcionarios, secretarios, jueces fiscales, abogados y procuradores afectados, con el fin de llegar a un acuerdo que ponga fin a la «lamentable y penosa» situación por la que dichos trabajadores atraviesan.

Las duras condiciones de higiene y el sofocante calor que deben soportar los empleados del Palacio de Justicia situado en la avenida Isidoro Macabich de Eivissa, «están empezando a hacer mella en el trabajo que éstos desempeñan allí. No se pueden aguantar ocho o diez horas así», apuntaba Nieto, quien asegura que, con la llegada del verano la situación se ha vuelto insostenible.

El portavoz del sindicato hizo referencia además a la controversia desatada ante la ubicación de los nuevos juzgados, solicitando «que dejen de jugar con este tema y adopten una solución. No creemos que sea tan difícil», señaló.