El accidente se produjo en el antiguo cruce hacia Jesús desde la carretera de Santa Eulària.

La jueza del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez, dejó ayer visto para sentencia el juicio contra un conductor de nacionalidad británica que causó la muerte en Eivissa de un motorista ibicenco en octubre de 2004. Tras escuchar el relato del acusado y de los testigos, el Ministerio Fiscal rebajó en un año la petición de prisión para el británico, que finalmente se enfrenta a una pena de dos años de cárcel, además de la importante indemnización económica que aún negocian los seguros de ambos conductores y que se estima que oscilará entre los 400.000 y los 600.000 euros.

El accidente que motivó el juicio de ayer se produjo el 15 de octubre de 2004 en el antiguo cruce de la carretera de Santa Eulària hacia Jesús. Según se explicó ayer en el juicio, el británico, Kingsley Basil G.B. acababa de rocoger un turismo de alquiler en el aeropuerto de Eivissa. Poco después, cuando llegaba al antiguo cruce de Jesús en la carretera de Santa Eulària entró por el carril contrario, acostumbrado como conductor británico a circular por la izquierda. En ese momento chocó con el motorista Juan Carlos N.R., de 36 años de edad.

La víctima circulaba en un motocicleta de 250 centímetros cúbicos. Fue trasladado por una ambulancia del servicio del 061 a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario. La hemorroagia cerebral que sufrió a consecuencia del fuerte golpe resultó demasiado grave. En el hospital permaneció cerca de dos años en estado de coma hasta que, finalmente, falleció. Kingsley Basil G.B. También sufrió heridas, mucho más leves, y recibió el alta ese mismo día. Fuentes judiciales explicaron que las compañías aseguradoras de los dos vehículos, como responsables civiles subsidiarios, están negociando la cuantía de la indemnización que recibirán los familiares del motorista fallecido, una cantid ad que se estima en derredor dem medio millón de euros.