El III batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME), al mando del teniente general Fulgencio Coll, llegado a la isla desde Valencia, realizó ayer en el cuartel de sa Coma una demostración de ante la consellera balear de Interior, María Àngeles Leciñena, y el delegado del Gobierno, Ramon Socias.

De esta forma quedó patente en Eivissa de forma práctica el protocolo de actuación que la Dirección General de Emergencias ha firmado con la UME, que se encargará de ayudar en las islas en situaciones graves en que sea necesaria su apoyo.

Normalmente la UME actúa sólo cuando el peligro alcanza el nivel 3, pero las dimensiones de las islas -especialmente Ibiza y Menorca-, implican un mayor peligro de afectación a zonas habitadas que en la Península, por lo que las intervenciones son más urgentes.

El convenio contempla también la colaboración y el intercambio de programas de formación, según explicó ayer en rueda de prensa la consellera de Interior, María Angeles Leciñena.

La representación de ayer, en la que los militares hicieron prácticas de extinción de incendios y apertura de cortafuegos, fue el preámbulo del gran simulacro de incendio forestal que afecta a zonas urbanas que se realizará hoy en la zona de Cala Comte, en el municipio de Sant Josep, de cuyos detalles ya informó este diario la semana pasada.

50 soldados

En el simulacro participarán 50 soldados de los cerca de 150 que forman el III batallón de la Unidad Militar de Emergencias, junto con los bomberos del Consell d'Eivissa, personal de las Fuerzas de Seguridad del Estado, agentes de la Policía Local de Sant Josep, voluntarios de Protección Civil y otros organismos, tanto de ámbito nacional como autonómico.

En el lugar del incendio simulado, cuyo área se extenderá entre la conocida como Torre del Pirata y la playa de Cala Comte, se instalará una base central de operaciones que albergará a los manos de todos los organismos implicados en el operativo y que deben tomar las decisiones.