El asesino de su novio en Cala Tarida se ensañó con la víctima al verse abandonado

A ello apuntan todos los indicios pese a que, en un principio, también se barajó la posibilidad de que, por la condición de toxicómana de la víctima, también se hubiera producido una pelea por drogas.

Tires A.S., el hombre que fue detenido en la noche del pasado sábado por la Guardia Civil nada más llegar a Barcelona en un barco de pasajeros, acompañó a Almerich al hospital después de presuntamente darle una brutal paliza a su pareja. A los médicos dijo que su compañero había intentado suicidarse cortándose las venas. Luego, fue al puerto de Eivissa y subió al primer barco que encontró. Christian Almerich se debatía entre la vida y la muerte en el hospital cuando la Guardia Civil registraba su casa de Cala Tarida. Allí se hallaron dos cuchillos de grandes dimensiones (uno, una espada tipo catana) que se cree pudieron ser utilizados para propinar una sucesión de golpes en la cabeza a la víctima. Dichos golpes explicarían las fracturas faciales, la rotura de mandíbula y el estallido ocular con pérdida de masa encefálica que presentaba el paciente. La rápida investigación de la Policía Judicial permitió detener en seis horas al acusado, tras averiguar que éste había subido a un barco hacia Barcelona e instalar el oportuno dispositivo para detener en esta ciudad al sospechoso.

El forense practicó durante la mañana la autopsia y el juez, ayer tarde, estaba a la espera de recibir un informe que presumiblemente iba a confirmar que Almerich murió por la brutal agresión que sufrió.