El cuerpo sin vida de Werner Hartung, de 72 años, fue hallado anteayer tarde en aguas del Port de Sant Miquel.

Werner Hartung, de 72 años, es la identidad del alemán cuyo cadáver apareció flotando anteayer en el Port de Sant Miquel. Todo apunta, a falta de que lo confirme la autopsia, a que dicha persona perdió la vida en un accidente, lo mismo que se piensa le ocurrió al joven cuyo cuerpo sin vida fue recuperado hace ocho días en aguas del acantilado de na Xamena que aún no ha sido identificado. La Guardia Civil, sin embargo, investiga la posible relación de ambos hechos por la coincidencia de distintas circunstancias que rodean a ambos casos. Nadie descarta, incluso, que ambos se conocieran con lazos de amistad o parentesco.

Hartung, residente en Eivissa, tenía un golpe en la cara y, según informaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Balears, todo apunta a que perdió la vida tras caer por las rocas. El primer reconocimiento a su cadáver indicaba que dicha persona podría llevar al menos cuatro días en el agua. La investigación, a su vez, trabaja con la hipótesis de que el otro cadáver recuperado en la costa de Sant Miquel fuera también de un alemán. La Guardia Civil lo rescató el miércoles 18 con síntomas de que su cuerpo llevara de más de 24 horas en el mar. La autopsia confirmó un día después su muerte por asfixia por inmersión.

Desde entonces no se ha denunciado la desaparición de ninguna persona que corresponda a su físico: pelo castaño, complexión delgada, ojos claros, unos 20 años de edad y 1,78 de estatura. El fallecido presentaba un tatuaje en el deltoide derecho -un signo oriental traducido por dragón- y portaba un reloj con correas de cuero de la marca Louis Valentin y una muñequera con la inscripción Mercedes Benz, así como un anillo dorado con un sello. También vestía una camiseta con la leyenda «Invitation to beach» y ropa interior de la línea «Intimo Vinci».