La policía investigaba ayer las circunstancias de la muerte de un ibicenco de 39 años que pereció a primera hora de la mañana de ayer junto al faro de es Botafoc después de estrellarse contra un muro con una moto a gran velocidad.

El suceso tuvo lugar antes de las siete de la mañana. El Cuerpo Nacional de Policía se hizo cargo de las pesquisas después de que, tras una primera inspección ocular, se hallaran indicios de la posibilidad de que el siniestro no hubiera sido simplemente un accidente. Según la información recogida por este periódico, la víctima, al parecer, iba sin casco y presumiblemente no frenó ni intentó ninguna maniobra evasiva cuando tuvo que darse cuenta de que el impacto era evidente, hechos que, en un principio, hicieron pensar en que el motorista pudo acometer intencionadamente una recta que iba a ser mortal para él. Comisaría, de todas maneras, estaba pendiente ayer de nuevas investigaciones y de los resultados de la autopsia para poder sacar conclusiones más concretas. La moto del fallecido fue retirada de es Botafoc completamente destrozada, otro hecho que se valoró para sopesar que se alcanzó gran velocidad antes de la colisión.

De todas maneras, esta es la cuarta persona que pierde la vida este año en las Pitiüses en las carreteras. La anterior víctima fue un peatón que murió arrollado en la carretera de Santa Eulària el pasado día 9.