La planeadora intervenida por la Guardia Civil, una embarcación de doce metros de eslora habitualmente usada por los 'narcos' para introducir hachís desde la costa africana a territorio español, apareció a primera hora de la mañana atrapada entre las boyas que hay en la orilla de Platja d'en Bossa para impedir que entren en zona de baño los barcos. La tripulación la abandonó dejando sus llaves puestas en el panel de mandos y sin rastro de droga en el interior.

Todos los indicios apuntan que la embarcación, dotada con tres motores de 250 cv, quedó la deriva después de que algún incidente desconocido motivara su abandono. El mar la llevó hasta la boyas que hay frente al restaurante Insula Augusta y alguien, a primera hora de la mañana, deparó en ella cuando las máquinas limpiaban la playa. La planeadora presentaba su costado de estribor dañado sin que se sepa si éste fue el motivo real por el que la presunta nave contrabandista quedó sin gobierno. La Guardia Civil, tras darse el aviso, se hizo cargo de la zodiac y la trasladó al puerto de Eivissa, lugar donde fue varada. Agentes del equipo de Policía Judicial realizaron luego una inspección ocular para intentar reunir alguna prueba que permitiera ahondar en las múltiples conjeturas que generó su aparición.Todas las posibilidades estaba ayer abiertas. La investigación tenía pendiente aclarar si la planeadora pudo ser utilizada para desembarcar un alijo de droga en la isla o bien ésta regresaba de desestibar su carga en otro punto de las Islas o de la Península. Del mismo modo, se desconocía si hubo un accidente durante las operaciones que pudieran llevar a cabo los presuntos traficantes o ésta sufrió más desperfectos tras quedar a la deriva.

La experiencia policial también ha demostrado que muchas veces los 'narcos' operan con dos planeadoras a la vez, dato que de haber sido así, deja la puerta abierta también a que la tripulación afectada subiera a otra embarcación gemela al verse en dificultades.