«Vete para el comedor que te voy a ahogar». Ésta fue la amenaza que profirió contra su pareja el hombre de 70 años que días atrás fue condenado a cuatro años y dos días de cárcel por abusar sexualmente en dos ocasiones de su nieta cuando ésta era entonces una niña de corta edad. El sospechoso salió absuelto de un tercer episodio de abusos que se le imputaba por falta de pruebas.

La misma jueza que dictó esta pena, la magistrada del juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez de Arellano, consideró probado en agosto de este mismo año que el acusado con esta amenaza «causó a la denunciante un gran temor y angustia dado el carácter violento y agresivo que venía mostrando éste desde el inicio de la relación sentimental». Por ello, se condenó al sospechoso a un año y diez meses de cárcel y a no poder acercarse durante tres años a su compañera, con la que tenía una relación sentimental desde hacía 40 años, en un espacio inferior a los 150 metros de donde la víctima estuviera. También se le prohibía contactar con ella durante el mismo periodo. El suceso concreto ocurrió sobre las diez de la noche del pasado 13 de julio de este año, momentos después de que el acusado volviera a su casa tras declarar como imputado en el juzgado de guardia por las diligencias que se incoaron por el caso de los abusos sexuales. «Al entrar en su domicilio fue recriminado por los hechos cometidos contra su nieta», recoge como probado la sentencia para explicar que, tras ellos, vinieron las amenazas.

La magistrada Clara Ramírez considera que la mujer muy probablemente fue también víctima de maltratos durante muchos años pero exonera de culpa penal a dicho individuo de este cargo por no existir «un mínimo descriptivo y probatorio» de estos sucesos. Durante el juicio, varios testigos confirmaron el talante agresivo del sospechoso y uno de los vecinos aseguró que en varias ocasiones había tenido que dar cobijo en su casa a la víctima.

Se da la circunstancia de que el acusado también fue denunciado años atrás por otros supuestos abusos a otra menor del entorno familiar.