El ladrón cogió un taxi en la parada de la Avenida Isidor Macabich de Eivissa.

Esta es la pena que finalmente ha pedido para él el fiscal, que también le considera responsable de una falta de lesiones por las heridas que sufrió la víctima. El acusado, que en los próximos días se sentará en el banquillo de un juzgado de lo Penal, entró en la cárcel después de reconocer la autoría del robo y mostrarse «muy arrepentido» por lo sucedido. El propio José A.C., al que le avala un amplio historial de antecedentes delictivos, dijo que era la primera vez que hacía una cosa así.

El ladrón de este caso cogió al taxista que iba a atracar en la parada de la Avenida Isidor Macabich de Eivissa cuando eran poco después de las diez de la noche del pasado lunes. Dicha persona pidió que le llevaran a Santa Agnès y cerca del kilómetro cinco de la carretera que eligió el taxista, cerca de Buscastell, tuvo lugar el robo. Según el relato fiscal, la víctima se vio sorprendida cuando el pasajero que llevaba le echó una cuerda por el cuello al tiempo que le tapaba fuertemente los ojos. El taxista, tras realizar bruscas maniobras, logró parar el coche. Fue en ese momento cuando el sospechoso se abalanzó sobre los asientos delanteros y, después de un forcejeo, se apoderó de un cajetín de monedas para el cambio que contenía 40 euros y de un teléfono móvil.