José Antonio Ribas, de 30 años, murió al chocar el coche en el que iba contra este talud. Foto: PAULA PALOMARES

El fatal siniestro tuvo lugar sobre las ocho y media de la mañana de ayer en el kilómetro 2, 300 de la carretera que une Santa Gertrudis con Sant Mateu. José Antonio Ribas fue evacuado por el 061 instantes después de que el turismo en el que iba se estrellara al salirse en una curva. Su estado, sin embargo, era crítico y no fue posible mantener sus constantes vitales antes de llegar al servicio de Urgencias de la Policlínica de Nuestra Señora del Rosario, centro donde la víctima ingresó ya cadáver.

La víctima viajaba de acompañante en un Seat Marbella de color rojo (NA-1610-AF) que conducía Antonio M.S., de 30 años y persona que salió ilesa. En la parte posterior del vehículo viajaban los italianos Paolo M., de 22 años y Laura T.C. de 29. Los dos fueron atendidos de heridas leves por los servicios sanitarios de emergencia.

Tráfico investigan ayer las circunstancias del siniestro pero, en principio, todo apuntaba a que el coche siniestrado iba a velocidad inadecuada cuando, circulaba en dirección a Santa Gertrudis, parroquia en la que, al parecer, residía el fallecido, y su conductor entró en una curva, momento en que perdió el control del vehículo.

El Seat Marbella se salió de la calzada por su margen derecho y colisionó sucesivamente contra un talud de tierra y contra un muro hasta que volcó en tonel.

En las primeras investigaciones realizadas por los agentes de la Guardia Civil de Tráfico se apreció que la víctima no lleva colocado el cinturón de seguridad. Tampoco lo habían utilizado los otros dos pasajeros que iban atrás. Antonio M.S, que dio negativo en la prueba de alcoholemia que se le practicó, por su parte, sí lo llevaba puesto.