El incendio quedó controlado a las 11 horas de ayer gracias al trabajo de un centenar de personas y nueve medios aéreos entre aviones y helicópteros.

Ayer a las once de la mañana la, Conselleria de Medio Ambiente dio por controlado el gran incendio que anteayer por se declaró en el valle de Morna. Entre 30 y 35 hectáreas de pino han quedado devastadas por las llamas en una zona que ya en agosto de 1983 sufrió un daño por fuego aún mayor. A pesar de que está bajo control, los medios aéreos continuaron durante toda la mañana de ayer volcando sus cargas de agua para impedir que se reavivara. La orografía del valle de Morna, con profundas vaguadas, complicó mucho los trabajos de extinción, en los que participaron cerca de un centenar de personas y nueve medios aéreos entre aviones y helicópteros. En los peores momentos, cuando las turbulencias de las llamas alcanzaban varios metros de altura y avanzaban muy rápido, los equipos de extinción de tierra estuvieron tentados de abandonar la zona.

En cuanto al origen del fuego, los investigadores dan por hecho que fue provocado y no intencionado. Es decir, una negligencia. La Guardia Civil realizó ayer interrogatorios a los vecinos de la zona. Por el momento, y siempre a la espera de conclusiones definitivas, la hipótesis más fiable apunta a que las llamas comenzaron en una vieja casa semiabandonada habitada por un hombre de nacionalidad extranjera y unos 40 años. Al parecer, recientemente falleció el propietario de este inmueble ubicado en pleno valle de Morna y su hijo permite a este hombre vivir en ella. Algunos vecinos dijeron que la noche anterior al incendio, que comenzó a las 9 de la mañana del jueves, se había celebrado una fiesta en esta casa. Lo que sí parece confirmado es que las llamas comenzaron en esta casa y, de allí, ascendieron por las faldas del valle. No obstante, fuentes oficiales explicaron que el asunto de la fiesta no está confirmado.