Los hechos que se juzgaron ayer ocurrieron en julio de 2003 en la parada de autobuses de la Avenida Isidor Macabich.

La acusación particular de la Policía Local de Eivissa ha solicitado a la juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa una pena de tres años y medio de cárcel para un padre y sus dos hijos, hombre y mujer, por la presunta comisión de un delito de atentado contra la autoridad y una falta de lesiones. Además, la fiscal solicitó para estas tres personas dos años de privación de libertad para cada uno por el presunto delito de atentado y diversa multas por las supuestas faltas de lesiones. Por su parte, la defensa de los tres acusados ha pedido para ellos la libre absolución.

Ayer, la juez del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez, después de escuchar a todas las partes y a todos los testigos, tanto a los de la defensa como a los de la acusación, dejó el caso visto para sentencia. El padre acusado junto con sus hijos es agente en activo del Cuerpo Nacional de Policía. Los hechos que se vieron ayer en este juicio ocurrieron de noche dos años atrás, en julio de 2003, en la parada de autobuses de la Avenida Isidor Macabich. Al parecer, según se desprende de los relatos de los testigos, el hijo del policía nacional estuvo a punto de atropellar con su coche a un hombre que, de forma indirecta, avisó de la situación a la Policía Local de Eivissa. Varios de estos agentes acudieron a la parada de autobuses y encontraron el coche en doble fila.