La Guardia Civil realizó controles en los buques procedentes de Denia que atracan durante la noche en Eivissa.

Al menos dos barcos de pasaje que unen Eivissa con Denia, uno de Baleària y otro de Iscomar, fueron objetos en la madrugada de ayer de inspecciones que realizó la Guardia Civil para presumiblemente detener al sospechoso de un asesinato ocurrido este fin de semana en la localidad alicantina de Xàbia. Según explicaron varios pasajeros a este periódico, los agentes pidieron en Eivissa la documentación exclusivamente a varones jóvenes.

Los controles tuvieron lugar pocas horas después de que fuera hallado en un descampado del casco antiguo de Xàbia el cadáver de una joven de 23 años cuya desaparición había sido denunciada un día antes. Los reconocimientos que se hicieron a la víctima, muerta por estrangulamiento, evidenciaron que el crimen se había perpetrado en la noche del sábado de Carnaval. Sin embargo, los primeros instantes de la investigación se creyó conveniente «tapar» todas las salidas que tenía el sospechoso, un hombre que ayer continuaba siendo buscado y que se cree estaba relacionado sentimentalmente con la fallecida, según explicaron desde el diario Las Provincias. La Guardia Civil averiguó durante las primeras pesquisas que el presunto asesino, un inmigrante sudamericano, carecía de vehículo propio, por lo que se barajó como muy probable que intentara huir de Alicante tomando uno de los barcos que comunican esta provincia con Eivissa. Otros agentes, por su parte, se encargaron de rastrear en las líneas de autobuses de la comunidad valenciana. Todo esto ocurrió después de que sobre las once de la noche tuviera lugar el descubrimiento de la chica, identificada como A.O.T., a 50 metros del aparcamiento Portal del Clot.